CAPÍTULO 105

Narra Louis

¿Y ahora qué? ¿Qué se supone que tengo que hacer? Estaba bastante cabreado como para hacer cualquier locura, así que lo mejor era irme. Me di media vuelta y con las manos en mis bolsillos todavía, empecé a andar.

-¿En serio, te vas? -dijo y seguí andando- Ya veo lo que me has echado de menos.

Paré poco a poco al decir ella eso y me giré. Me quedé callado con una sonrisa asomando por mi cara. Miré hacia el ventanal donde estaba antes sentada y vi al tío ese, otra vez. Sonreí más todavía. 

-Y yo ya veo lo mucho que me has echado de menos tu. No has perdido el tiempo vaya. -me referí a aquel capullo de ''Marcos el chico maravilloso''. Idiota.

-¿Eso es lo único que sabes decirme después de semanas sin vernos? -no dije nada.

-Perfecto -dijo después de unos segundos mirándonos sin decir nada.

Entró y volvió a sentarse al lado de ese. Me enfadé más todavía y fui al O2 Arena. Tenía cosas mejores que hacer. Tsss.

Narra Paula

Perfecto. Louis era un completo gilipollas. Cada día me lo demostraba más. 

-¿Qué ha pasado? -me preguntó Marcos nada más sentarme. 

-¿Qué que ha pasado? Que Louis es gilipollas. 

-¿Qué te ha dicho?

-No me quiere.

-¿Te ha dicho que no te quiere? -preguntó sorprendido.

-No, no me ha dicho eso pero lo sé. 

Empezaron a salir lágrimas de mis ojos.

-No llores, shh. -se sentó a mi lado y me abrazó.- Seguro que has malinterpretado todo -lloré más-. Nooo, no... pero deja de llorar. No quería decir eso, lo siento.

Cuando dejé de llorar le expliqué más o menos por qué nos habíamos enfadados hacía unos días y la reacción que los dos habíamos tenido hoy. No había querido decírselo antes porque no quería que él se sintiera mal. Justo como se sintió al decírselo.

-No... -negó con la cabeza- Yo no quiero que estéis así por mi culpa.

-Pero no es tu culpa -iba a seguir pero me interrumpió.

-Sí lo es. Mira, a mi me ha encantado conocerte pero no me quiero interponer entre vosotros dos... así que creo que lo mejor es que hagamos como si no nos hubiéramos conocido y ya está. 

-Marcos...

-Sí Paula, creo que es lo mejor para todos. No entiendo muy bien a tu novio porque simplemente somos amigos pero si me tengo que alejar para que estéis bien... lo voy a hacer. 

-Como veas. 

Me cruzé de brazos y se rió. 

-No te enfades -dijo con una sonrisa.

-No me enfado. 

Lo convencí para que al menos comiéramos juntos ese día ya que estábamos ahí y aceptó. Después de comer volvimos cada uno a nuestros respectivos trabajos. 

Al salir del trabajo subí a un taxi para ir a casa. Miré el móvil y tenía varios WhatsApp's de Harry diciéndome que no podía faltar al concierto de esa noche. Le dije que no podía ir y me llamó. 

*Conversación telefónica* 

-¿Cómo que no puedes venir al concierto de esta noche? -dijo nada más aceptar la llamada. 

-Hola Harry, yo también te he echado de menos -me burlé.

-Haha lo siento -se disculpó-. ¿Cómo estás?

-Mejor haha. Bien ¿y tu?

-Te lo diría si vinieras al concierto de esta noche -auch. 

-Harry...

-¿Por qué no quieres venir? Entiendo que no quieras porque Louis y tú estéis enfadados pero ¿no quieres vernos a nosotros? 

-Harry... -volví a decir pero me volvió a interrumpir. 

-Gracias. Supongo que cuando tengas ganas de verme vendrás y a lo mejor yo no tendré tiempo, como tu esta noche -y colgó.

*Fin de la conversación telefónica*

Intenté llamarlo pero rechazó la llamada. Genial. 

Apoyé la cabeza contra la ventanilla del taxi y me maldije por todo. ¿Algo más podía salir mal ese día? Seguro que sí. Total... un poco más no iba a marcar la diferencia. Louis, Marcos, Harry... ¿qué le estaba pasando a mi vida?

Llegué a casa y antes de acomodarme del todo, saqué a pasear a Owie. Necesitaba darme una ducha y enterrarme en la cama entre mil mantas y nada de luz. Necesitaba ''desaparecer'' lo que quedaba de día ya.

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-¡Ayyy joder! -me despertó un fuerte ruido acompañado de esa voz. 

Salí de las miles de mantas e intenté desperezarme para ver de qué se trataba. O mejor dicho, de quién.

-Oh, siento despertarte. No sabía que estabas aquí.

Se agachó para recoger una maleta del suelo. Supongo que eso había sido el ruido. La maleta se habría caído por la escalera. No dije nada, sólo lo miraba. 

-Tranquila, ya me voy. Sólo he venido a por más ropa para llevármela en la gira. 

Mientras él subía al vestidor y bajaba cosas que se quería llevar, yo me levanté de la cama y subí y me apoyé en una de las paredes. Sólo lo miraba, ninguno de los dos decíamos una palabra. 

Hubo un momento que se quedó mirándome también, a unos dos metros de distancia. 

-¿Podemos hablar? -le dije.

-¿Hablar de qué? -dio unos cortos pasos hacia mi- ¿Hablar de quién es ''Marcos el Chico Maravilloso''? ¿Hablar de lo bien que te lo pasas con él por las noches? -abrí la boca para hablar pero no me dejó- Ah, no, que no sólo es por las noches, también os veis por el día. ¿Quieres hablar de eso o qué prefieres? -hizo una pausa la cuál me mató- Si quieres también podemos hablar de las chicas a las que he visto estos días mientras tú quedabas con el Chico Maravilloso -una lágrima rodó por mi mejilla.

-Eres un imbécil. 

Me acerqué a él y empecé ha darle golpes en el pecho mientras muchas lágrimas más rodaban a pares por mis mejillas. 

-¡Te odio! -seguí con los golpes pero me cogió por las muñecas y me paró. Intentaba darle más pero caminó hacia delante llevándome a mi hacia atrás hasta apoyar mi espalda en la pared. 

-¿Sabes lo que has estropeado? -me dijo.

Narra Louis

No pude evitar decirle todas esas cosas. Se me rompió el alma verla llorando pero necesitábamos aclarar muchas cosas. 

-¿Que yo lo he estropeado? -asentí con la cabeza e inconscientemente miré hacia sus labios- ¿Estropear qué, Louis? 

Estábamos cerca, muy cerca. Ella apoyada en la pared y yo con mis brazos a los costados de su cabeza. Nuestras respiraciones se mezclaban. 

Nuestros corazones iban a mil. 

-He pasado unos días fatal por tu culpa -dijo casi susurrando.

-Yo también -susurré para ella, un poco más cerca. 

No lo soporté más y entreabrí los labios cerca de los suyos pero sin tocarlos, como pidiéndole permiso. Cerró los ojos y asintió, después de tantos y tantos días sin ningún contacto físico entre nosotros, las chispas volvieron. En realidad nunca se fueron. Teníamos mucha tensión sexual acumulada. 

Enrollé sus piernas en mi cintura y la besé como hacía tiempo que no lo hacía. Se notaban las ganas que teníamos del otro. Gemimos casi al mismo tiempo y, con mucho cuidado para no caernos, le quité la camiseta que llevaba puesta. Puse mis manos al final de su columna y bajamos las escaleras hasta llegar a nuestra habitación entre besos que dejaban ganas de más. Me quitó la camiseta con dificultad ya que yo no dejaba de recorrer su cuello con mi lengua. 

Necesitábamos esto de verdad aunque no significaba que las cosas estaban bien entre nosotros.

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HOLA HOOOOOLA,

aquí el capítulo 105, UEEEEEEE.

Siento subir ahora cada mil días pero estoy muy líada... :|

El miércoles 30 fue mi cumpleaños jejeje (:

Iba a subirlo ayer pero como hoy estrenaban Story Of My Life digo ''pos me espero y fangirleo por aquí'' jajajajajajaja.

¿QUÉ. OS. HA. PARECIDO? AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHH

ALABADO SEA BEN WINSTON!!!!!!!!!!! HA SIDO TAN ASDFGHJKLÑLKJHGFDSASDFGHJKLÑLKJHGFDSASDFGHJKLLKJHGFDSA SABÉIS? AYYYY MAYYYYY QUE ME DA UN ATAQUE O ALGO!!!!!!!!!!!!!!! UUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUHHH PER FAVORRRRRR!!!!

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OS LOVEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEO