CAPÍTULO 50

¡¡ I'm back friends !!

Bueno y aquí el capítulo 50. ¡Qué fuerte! Ya el 50. Y todo gracias a vosotros :) ¿Cómo no os voy ha querer? Haaaay mare, lo dicho, OS QUIEROOOOO MUUUUCHOOO. 

Jajaja bueno y después del momento ''Os quiero'' no me enrollo más y os dejo leer el 50. Espero que os guste. A mi me gusta :) 

Decirme que os parece directioners míos ;) 

LEER - COMENTAR - VOTAR - RECOMENDAR

¡¡¡ OS LOVEO !!!

Narra Paula

-¿Que ha sido eso? 

-Pues que resulta que ahora LA CULPA ES MÍA POR INTENTAR SER BUENA PERSONA. -y dicho esto, imité a Louis hace apenas unos minutos y salí de casa dando un portazo y cabreada. 

No sabía donde ir, pero claro está, no me iba ha quedar en casa para que todos empezaran a preguntar miles de cosas y yo me calentara más la cabeza. Empecé a andar por la calle de casas iguales que habían por la urbanización. 

-¡Paula, espera! -me giré y vi ha Harry acercarse hasta donde yo estaba. 

-¿Qué quieres Harry? -dije cruzándome de brazos. 

-¿Qué ha pasado? ¿Por qué se ha ido Louis así y ahora tú? -lo preguntó en tono preocupado. 

-Mira, ahora no me apetece ¿vale? Ya si eso en otro momento. -me volví a girar con la intención de volver a poner rumbo a donde quisiera que iría. 

-Paula, por favor. -me cogió el brazo impidiéndome andar.- Eres mi mejor amiga, y quiero ayudarte. ¿Qué es lo que ha pasado? 

-Nada... -una lágrima cayó por mis mejillas. 

Harry hizo un movimiento rápido y me abrazó. Quedando mi cabeza en su hombro y el pasando su mano por mi cabeza. 

-Ven. -me dijo después de unos cuantos segundos abrazados.- Vamos a un sitio más tranquilo para hablar, anda. 

Yo solo asentí y lo seguí. En apenas unos cinco minutos en silencio llegamos a un especie de parque. Todo lleno de árboles y bancos para sentarse. 

Estuvimos andando un par de minutos más por el parque hasta llegar a un sitio un poco más apartado y escondido. Parecía que Harry se sabía muy bien cada milímetro de aquel bonito parque. Al fin nos sentamos en un banco y me cogió de las manos. 

-Venga, cuéntame que es lo que ha pasado. -mis ojos se humedecieron.- Ha no, pero eso sí que no, no tienes que llorar. ¿De acuerdo? -asentí y empecé ha contarle todo hasta el más mínimo detalle. 

-Y yo solo quería que nos lleváramos bien. Según me ha contado Louis, antes eran inseparables, y la verdad, antes de yo empezar ha salir con Dylan y aún saliendo, pues también. Y por eso le dije de que sí lo perdonaba. Para que no estuviesen enfadados. -dije casi llorando. Poco me faltaba.- Yo solo quería ayudar y arreglar las cosas... ¡joder! ¡Y encima es que se enfada! -acabé llorando como una niña. 

-Mira, ¿Sabes que te digo? -me dijo abrazándome de nuevo para que no llorara.- Que yo en tu lugar habría hecho lo mismo. Pero Louis es muy orgulloso y por eso le cuesta mucho aceptar un ''¿Me perdonas?'', porque él, ahí donde lo ves, se toma muy enserio ese tipo de cosas. 

-¿Entonces? -levanté la cabeza para mirarlo.- ¿Qué hago? Si ya está enfadado conmig...

-Se le pasará pronto. -me interrumpió.- ¿No ves que te quiere demasiado? -''No creo que se le pase pronto...'' -Ahora mismo estará pensando en como hacer para pedirte perdón por haberse enfadado así, pero sin querer aceptar el perdón de Dylan. Y ahí es cuando él pensará en Dylan y en lo mucho que han pasado juntos. Entonces... 

-Se dará cuenta de que tienen que volver ha ser amigos y apartar su orgullo para ir en busca de Dylan y pedirle perdón. 

-Exacto. Bueno... puede que tarde en hacer todo eso. Tu novio es un poco lento en idealizar algo así él solito. -le di en el brazo.- Auch... era broma. -reí y él también.- No, pero ahora enserio. Puede que no lo haga ahora, pero te aseguro que lo hará. Tarde o temprano. Ya lo verás. 

-Gracias Harold. -dije acurrucándome entre sus brazos. 

-¿Por qué? ¿Por ayudar a mi mejor amiga? 

-Sí, por todo. –hubo un corto silencio.- ¿Soy tu mejor amiga? -dije sonriendo. 

-Pues claro. ¿Tú que te pensabas mi Pequeño Poni? -dijo con una amplia sonrisa. 

-Oggg, me agotas Harold. -soltó una pequeña carcajada.- No me digas eso... 

-Jajaja sabes que te lo diré. Quieras o no. -me separé de él y me senté bien. Apoyé la cabeza en su hombro. 

-Pues vale. Yo te llamaré Harold. -la verdad que me hacía gracia llamarlo Harold.- Y que sepas que tu también eres mi mejor amigo, Harold. 

-Un placer, mi Pequeño Poni. -y dicho eso se levantó y me tendió la mano para que me levantara.- Vamos a casa, anda. 

Pusimos rumbo a la salida del parque y empezamos ha andar. 

-Creo que tu casa está por allá, ¿sabes? -dije señalándole hacia el lado opuesto hacia donde íbamos andando. 

-Ya lo sé pija, pero tu casa está hacia allá. -señaló con la cabeza. 

-Y... ¿como conoces tan bien ese parque? -le pregunté al poco de seguir andando. 

-Te recuerdo que vivo por aquí, -puse los ojos en blanco y él rió.- y cuando me apetece estar solo, pues voy ahí. 

-Mmm... interesante. 

-Claro, es un dato de la vida de Harry Styles. 

-JAJAJAJA emocionado... -le rechisté. Él rió al ver lo que le dije. 

En unos escasos minutos llegamos a mi casa, estábamos en la puerta. 

-Seguro que nos están echando de menos. -dijo en tono interesante. 

-A ti, a mi no. -dije llamando al timbre. 

Narra Louis

''La hecho de menos, joder. Y eso que no hace ni tres horas que la he visto.'' Ya eran las siete de la tarde y Harry aún no había venido. ''Se habrán quedado a comer allí todos.'' ¿Ese todos incluye a Dylan? Dylan. ''Dios, que me haya enfadado con ella por él... Soy imbécil, de verdad. Tengo que disculparme pero ya.''

Subí para mi habitación corriendo y me puse algo de ropa más decente. Para salir a la calle y eso, lo típico vamos. La cuestión, me puse un pantalón de chándal gris y una camiseta de un gris más oscuro que el pantalón con una sudadera azul marina encima. También me puse mis converse blancas y el gorrito que me regaló Paula en Los Ángeles. Sí, ese que yo también le regalé. 

Cuando abría la puerta de mi habitación para salir Harry entraba a la suya. Al verme si giró. 

-Hombre, si está aquí el que se enfada con su novia... -me reprochó. 

-Déjame ¿vale? -dije guardando mi móvil en el bolsillo de mi pantalón de chándal.  

-Está bien pero, ¿te dignarás al menos en pedirle perdón, no? 

-¿Dónde te crees que voy si no? -pasé de él y sin escuchar lo que me dijo salí de casa. Solo escuché ''Voy ha ducharme.'' Creo que también dijo algo de un paraguas. ''Claro, es que está lloviendo a mares.'' ''Mierda, y yo sin paraguas y sin las llaves del coche ni de casa. Llamaría al timbre pero Harry iba a ducharse. Bueno, da igual. Voy andando, aunque esté lloviendo tengo que ir a pedirle perdón.'' 


_________________________________________________________________________________
Si hay alguien nuevo que quiere que le avise cuando suba, que me lo diga por aquí o por twitter ;) Lo haré encantada. 

CAPÍTULO 49

¡¡ Hooooola !! 

Bueno, hoy subo porque tenía muchas ganas de subirlo. No aguantaba más. Por eso, y porque estoy muy contenta. No sé. Decirme que os parece el capi. 

Solo una palabra: Capitulazo. 
OMG... ¿Qué pasará en este capítulo? ¡¡¡A leer!!!

Preguntas en http://ask.fm/PaulaRomeroH
Tumblr: http://paularomeroh.tumblr.com/

LEER - VOTAR - COMENTAR - RECOMENDAR

¡¡¡ OS LOVEO !!!

Narra Rocío

Sin decir nada, me di media vuelta y fui hacia la puerta para abrirla. Madre mía, haber que pasa ahora...

-¡Rocío! -me gritó Paula emocionadísima al verme al otro lado de la puerta. 

-¡Paulaaa! -la abracé.- Tenía ganas de verte. -le di un sonoro beso en la mejilla. 

-A ¿y a mi no? -dijo Lou ''ofendido''. 

-Jajaja si tonto. -dejé de abrazar a Paula y entró al salón.- Anda, dame un abrazo. 

Los demás entraron mientras abrazaba a Louis y se quedaron en silencio. 

-Huy... que poco habladores que están hoy... -dijo Louis cogiendo la maleta de Paula.

-Ahora entenderás el por qué. -puso cara de no entender.- Anda, pasa. 

Antes de que Louis llegara al salón cerré la puerta. Llegamos y vi el panorama. A las chicas y a Izan sentados en los sofás, como antes vamos. Los chicos estaban sentados en los huecos de los sofás que quedaban libres y Paula de pie. Su cara parecía un poema. Y la de Louis al ver a Dylan ahí, también. 

-Bueno... ya puedes empezar. -le dijo María seria.- Ahí los tienes. -dijo señalándoles a Paula y a Louis. 

-¿Empezar? -preguntó Paula. 

-¿El qué? -siguió Louis. 

-Aquí, Dylan. Que dice que a venido a ped.... 

-María, deja que se explique él. -la cortó Britanny. Estaba seria.- Vamos fuera al jardín nosotros y ellos que se queden aquí hablando. 

Narra Louis

Pero... ¿qué? No entiendo nada, la verdad. ¿Qué es lo que quiere Dylan ahora? Eso solo tiene una palabra. Molestar. 

-Y bien... -le dio paso Paula para que empezara ha hablar. Yo solo me limité a sentarme en el sofá quedando frente a él. Ella se sentó a mi lado en el apoya-brazos. 

-Pues... -miró al suelo y volvió a mirarnos alternadamente.- Quería pediros perdón po... 

-¿Por qué? -dije irónico.- ¿Por decirme que ya no sentías nada por ella? ¿Por ayudarme a elegir su regalo y luego darme esa puñalada trapera? ¿Por intentar quitarme a Paula, aún tú sabiendo lo que yo sentía por ella? -me estaba cabreando. Y mucho. 

-Sí, joder... -resopló.- Por todo Louis. POR TODO. -le cogí una mano a Paula y ella la apretaba fuerte.- Sois mis amigos. O por lo menos lo erais. Sabéis que he pasado con vosotros algunos de los mejores momentos de mi vida. Y no por mis putas tonterías y impulsos quiero perderos. 

Paso. Aunque en realidad tiene razón, hemos pasado algunos de los mejores momentos de nuestras vidas. Pero aún así, paso. 

-Por favor. -dijo bajando su tono de voz.- Perdonarme. Darme una oportunidad. -dijo ésto último en un susurro apenas audible.

En realidad quería volver a tenerlo como amigo. Para mi, él siempre a sido como un hermano. 

Pero no tenía ganas de pedirle perdón, la verdad. Estaba muy dolido con lo que había hecho. 

-Claro. Per... -¿Qué? ¿Había escuchado bien a Paula? 

-¿CLARO? -me levanté bruscamente del sofá.- ¿Eso es lo que le dices después de todo? -la miré enfadado. No estaba enfadado con ella(bueno, ahora un poco sí), pero ya estaba enfadado por la situación en sí.- Mira, haz lo que quieras. -Salí de su casa dando un portazo. 

Narra Paula

-Mira, haz lo que quieras. -y dicho eso salió por la puerta de casa dando un portazo y muy cabreado. 

¿Perdona? ¿Se acaba de ir de mi casa dando un portazo? Encima se enfada... Y decía que era su amigo. No, que digo, decía que era como un hermano para él. ''Paula, éramos como hermanos.'' Palabras textuales de Louis hace unas semanas. Mentira. Si tan amigo-hermano que era para él, ¿por qué mierdas se enfada de esta manera por querer intentar que podamos volver a llevarnos bien? Pues ahora, lo llamo y que me explique porqué ese comportamiento de niño pequeño por su parte. 

-Paula... yo no quería que se enfadara de esa manera. -se intentó disculpar Dylan. 

-Tranquilo. Es que hoy está sensible. -le dije para quitarle importancia al asunto. 

-Entonces... ¿todo bien entre nosotros? 

-Si, claro que sí. -dije mientras buscaba mi móvil por mi bolso. 

-Me alegro que me perdones. Creía que no me perdonarías. 

-Ya. -¿DONDE ESTÁ MI MÓVIL JODER?.- Mira Dylan, creo que será mejor que te vallas. Otro día nos vemos. ¿vale? 

-Sí, será lo mejor. -se levantó del sofá.- ¿Te apetece quedar mañana y damos una vuelta? 

-Sí, claro. ¿Por qué no? -no enserio, ¿donde está? 

-¡De acuerdo entonces! -dijo contento dirigiéndose hacia la puerta.- Pues mañana si quieres paso a recogerte a las 5. ¡Adiós! -y salió por la puerta. 

¡Bien, aquí está! Haber... Menú, agenda, Lou... Llamar. Que bien... no me lo coge. 

En ese momento la rabia me subía por momentos. Intenté llamarlo otra vez. Nada. 

-¡Joder Louis, cógeme el móvil! -dije lanzando el móvil contra el suelo. Bien, en mil pedazos. Lo que faltaba. Móvil roto. 

-¿Que ha sido eso? -dijeron todos entrando al salón con cara de preocupados. 

_______________________________________________________
Video LWWY ;)

http://www.youtube.com/watch?v=AbPED9bisSc&playnext=1&list=PLVIPG1QZZLSBGJ_RYDIBSXCT-PBAA3CGW&feature=results_main

CAPÍTULO 48

I'm back after a week 

''Sí... Por fin...'' Pensaréis todos, seguro. Lo sé. Y siento mucho estar una semana (o más) sin subir. Pero me ha sido imposible. De verdad. Y este finde igual, porque me he ido a Lorca ha visitar a la familia. 

Pero prometo que intentaré subir siempre que pueda. (Los findes, y si puedo alguno que otro día entre semana). 

Bueno sé que estáis igual de emocionadas que yo con LWWY, ( SON LOS MEJOREEEEEES, SI SEÑOR!!!!!! ) Llevan 19737527 visitas y segurísimo que aún les quedan muchísimas más. 

Bueno (sobre este capi) no me gusta mucho como ha quedado. Es muy djsfkhaf, No me gusta. Haber que opináis vosotros... 

Preguntas en http://ask.fm/PaulaRomeroH

¡¡¡ OS LOVEO !!!

Narra Paula

Llegamos al aeropuerto de Heathrow y el ambiente parecía estar alterado. Al fondo del aeropuerto había un corro de gente (todas chicas) chillando y llorando de la emoción. Supongo que sería de la emoción. Digo yo...

-¿Qué estará pasando? -le pregunté a Lou. 

-Creo que sé lo que pasa... -dijo con media sonrisa. OMG me encanta esa sonrisa.- Vamos ha acercarnos y lo entenderás. 

Nos acercamos poco a poco donde estaban esas chicas y entendí el porque tanta hormona suelta por Heathrow. Estaban los chicos. 

Nos quedamos un poco alejados del corro esperando a que acabaran de firmar y hacerse fotos. 

-Venga, ya está. -las calmó Zayn.- Tranquilas. 

-Chicas, nos tenemos que despedir ya de vosotras. -ahí el Daddy. 

-Sí, tenemos algo que hacer aquí. -siguió Niall. 

-Ha sido un placer, de verdad. Nos encantaría estar aquí más tiempo, pero no podemos. -como no, el bien quedado de Harry. 

Y así, así, el corro fue desapareciendo y los chicos se dieron cuenta de que estábamos ya allí. 

-¡Mi Pequeño Poniiiiiiiiiiiii! -me chilló Harry al verme. 

-Pija o Pijilla me gusta más... -dije desviándome para ir a abrazar a los demás. 

-Pues a mi me gusta más Pequeño Poni. -me guiñó un ojo.- Anda, abrazame. Que lo habrás echado de menos. -dijo volviéndose ha poner frente a mi. 

-JAJAJAJA. No. -me miró serio.- JAJAJAJAJA. Anda ven. -dije abriendo los brazos.- Pero tu si los has echado de menos. -le dije al oído riéndome. 

-JAJAJA yo tampoco pija. -me abrazó fuerte.

-Oye, oye... Yo también quiero un abrazo. -se quejó Niall. 

-Y yo después. -dijo Liam. 

-Abrazo colectivo y ya está. -sugirió Harry.

Y así fue. Abrazo colectivo. 

-¿Dónde están los demás? -pregunté mientras subíamos a la furgoneta. 

-En tu casa. -contestó Zayn.- Es que todos no cabíamos en la furgoneta. 

-Claro... 

-Es que no piensas... he. -me dijo Harry. 

-Cállate. -le pegué en el hombro. 

-No. 

-Sí.

-No. 

-Sí. 

-N...

-Os calláis los dos. ¿De acuerdo? -puso orden Liam. 

-Claro, pero he ganado. Porque el se tiene que callar. -sonreí triunfante. 

-Oh, venga Louis. -se quejó.- ¿No la podías haber dejado allí en Liverpool? 

-JAJAJAJA no. Me quiere demasiado. -me defendí.- A parte, tu me necesitas en tu vida... 

-JAJAJA no te creas he... 

-Bueno, bueno... hablando de Liverpool... -dijo Zayn.- ¿Que tal tu familia Lou? 

-Muy bien. -suspiró y agachó la cabeza. 

-Venga tío... sonríe. -lo animó Niall dedicándole una sonrisa.- De aquí poco las volverás ha ver. 

-Claro que sí tonto. -le di un beso en la mejilla. (Estaba sentada a su lado en la furgoneta).- El tiempo pasa volando. -me sonrió.- De aquí poco están en tu casa. 

-Ya hemos llegado. -dijo Liam.

(Dentro de casa)

-Si que tardan... -dijo María cambiando de canal. 

-Pues si he. -dijo Izan. 

-¿Habrá pasado algo? -se preocupó Rocío.

-Rocío, cariño. Son One Direction, en un aeropuerto, lleno de gente... -le dijo Brit. 

-Joder, vale... Pero ¡estoy nerviosa! Quiero verles ya.

-Yo también. -matizó Mireia justo antes de que llamaran al timbre.

-¡HAAAA YO ABRO! -dijo Rocío levantándose bruscamente del sofá. 

Se dirigió corriendo hacia la puerta y abrió.  

Narra Rocío

En cuanto escuché el timbre no me lo pensé mucho y como una loca me abalancé sobre la puerta para abrir. 

Pero la sorpresa fue que al abrir no eran ellos. Es más, era una de las personas que menos podría esperar en aquellos momentos. 

-¿Dylan? -me quedé muerta al ver quién era. 

-¿Tan mal voy? -dijo mirándose la ropa de arriba a bajo. 

-Hm... no. No es eso. -¿que mierdas hacía aquí?- ¿A que has venido? -dije de lo más amable posible. 

-Pues... quería disculparme con Paula y con Louis. -claro... disculparse.- Vengo de casa de Louis pero no había nadie. Y he pensado que estarían aquí. O al menos que estuviese Paula. 

-A... -no sabía que decirle.- Pues no están. Bueno... estarán apunto de llegar. -miré el reloj de mi muñeca.- Pasa si quieres. 

Me aparté de la puerta y lo dejé que pasara. Pasamos los dos y cuando los demás lo vieron se quedaron sin decir nada. Solo se dedicaban a mirarle mal. Bueno, todos no. María nunca se quedaba sin palabras. 

-¿Se puede saber que es lo que estás haciendo en esta casa? 

Él no sabía como decirlo. Es que claro, María tan directa como siempre. A veces daba miedo. 

-Viene ha disculparse con Paula y con Lou. -intervine yo. 

-¿Estás de coña, no? -María guerrera en modo On. Jajaja. 

-Va enserio. -se defendió él. 

-Pues pierdes el tiempo. 

-María, relájate un poco. -intentó calmarla Izan.- Vamos ha dejarle que se disculpe cuando lleguen. Tu no puedes hacer nada. 

-Pero es que... -sonó el timbre. Tienen que ser ellos. 

CAPÍTULO 47

 ¡¡¡ Hooolaa Hooliitaaa !!!

 Bueno chicos, aquí va el capítulo 47 :) 

He subido hoy que he tenido muchas visitas entre ayer y hoy. ¡¡Así me gusta!! 

Bueno quiero aclarar una cosa sobre la familia de Louis (en esta novela): Ya sé que sus padres están separados, pero he preferido que en la novela no. No sé, creo que así mejor. 

Si hay alguien que quiere preguntarme cosas o lo que quiera, ya sabe:                           ( http://ask.fm/PaulaRomeroH )

LEER - COMENTAR - VOTAR - RECOMENDAR

¡¡¡ OS LOVEO !!!

Narra Paula

Los días iban pasando, ya estábamos a viernes por la mañana y el sábado después de comer nos tendríamos que volver a casa. Que pena, con lo que Lou estaba disfrutando con su familia... Lo bueno era que en tres semanas su familia iba a Londres a casa de Larry ha pasar unos días. Menos su padre, que no podía.

Estos días nos lo habíamos pasado realmente bien, hemos ido al cine con sus hermanas, al parque de atracciones, a la bolera... Lou me ha estado presentado a algunos amigos suyos de cuando el venía por aquí por Liverpool más a menudo... en general, muy bien todo.

En esos momentos estábamos con sus hermanas en un mercadillo de esos tipo feria que venden cosas echas a mano. Era muy acogedor y muy bonito, la verdad, y yo estaba sumergida en mis pensamientos.

-Cariño... -me llamaba Lou.- Te estoy llamando.

-Hay, perdón. -me concentre más.- No te había oído.

-¿Qué le pasa a mi princesita? -se acercó un poco más a mi.

-Nada fuera de lo normal. -le sonreí.- Solo estaba pensando.

-Y... ¿en que? -puso cara de preocupado.- Puedes contarme lo que sea. ¿Lo sabes, no? -asentí.

-Solo estaba pensando en que mañana nos tenemos que ir... y sé que a ti te gustaría estar aquí más tiempo... -agachó la cabeza y suspiro.

-Y tienes razón. -me sabía mal, pobrecillo joder.- Pero no podemos hacer otra cosa... -se quedó varios segundos callado.- Bueno, sí. -lo miré.- Podemos contar los días que quedan para poder verlas otra vez en mi casa. -sonrió y yo con él. Yo no sé como alguien podría ser tan positivo.

-Pues eso hay que hacer. -le guiñé un ojo.

-Anda, abrázame. -y abrió los brazos para que lo abrazara. Y yo encantada, claro.

Me acerqué como una sanguijuela y abracé con todas mis fuerzas a mi Boo Bear. Madre mía, este chico es super abrazable. Me encanta.

Levanté la cabeza para mirarlo y le sonreí como una tonta, a lo que el me besó tiernamente.

-¡Venga, vamos! -nos gritó Phoebe tirando de nuestros brazos para que siguiéramos andando.

-¡Pero Phoebe! -la regañó Fizzy.

-Es una corta royos... -matizó Lottie.

-Venga, venga, que no pasa nada chicas. -las calmó Louis mientras los dos reíamos por la naturalidad de Phoebe. Cuando empezamos a andar otra vez para seguir con la ruta, me cogió de la mano y así fuimos todo el rato. Bueno, así y vigilando a sus cuatro hermanas que iban por delante de nosotros. 

-¿Sabes? -me miró para que siguiera hablando.- Me gusta mucho. -dije poniendo delante la rosa que me había regalado. 

-Me alegro. -y me besó mientras sonreíamos. Las gemelas nos miraban.- Venga, vamos a casa que ya es hora de comer. -efectivamente, era esa hora y yo ya tenía hambre. 

En unos diez minutos (andando) llegamos a casa de sus tíos. 

-¡Ya estamos en casa! -gritaron los cinco a la vez. ''Cosas de los Tomlinson, supongo.'' 

-¿Que tal lo habéis pasado chicos? -dijo su madre saliendo de la cocina. 

-Muy bien. -dijimos todos. Las gemelas se acercaron a ella y Jay les dio un beso a cada una. 

-¿Sí? Me alegro. -dijo quitándose el delantal.- Voy ha poner la mesa. 

-Espera, que te ayudo. -dije siguiéndola hasta la cocina. 

(Una vez en la cocina) 

-Mmm, que bien huele... -dije cogiendo los vasos suficientes para todos.- Me suena este olor...

-¿Te gusta? -asentí.- Pues huele a tarta de chocolate... -se me abrieron los ojos.- Un pajarito me dijo que te encanta y que te comiste media tarta tu sola. -me puse roja. 

-Jajaja que exagerado es. -dije refiriéndome a Lou.- Lo que pasa es que ellos no comieron casi nada... -reímos.- Pues bueno, ahora que te tengo delante... ¡Es la mejor tarta de chocolate que he probado nunca! Te felicito. 

-¡Gracias! Me alegro pues que te guste tanto. -volvimos ha reír.- ¡Ha! Una cosa, que se me olvidaba... que Dan y Katy no comen en casa. -le dije un simple ''Vale.'' y volví ha guardar en el armarito de los vasos los dos que sobraban. 

En un abrir y cerrar de ojos ya habíamos puesto la mesa y ya habíamos acabado de comer. Al acabar de todo nos sentamos en el sofá. Estaba cansada. ''Cada día, más perra.'' 

-Ahh, me duele la tripa... -dije apretando un cojín a mi barriga. 

-Normal. -se burló de mi Louis. Yo le miré con cara de ¬¬ .- Anda ven. -me atrajo hacia él y nos acurrucamos un poco más en el sofá.- Si no tuvieras la manía de comer tanta tarta...

-Ohh, venga... -le besé la mejilla.- Es irresistible.

-Yo si que soy irresistible…

-JAJAJAJA. –le contagié la risa.- En eso te doy la razón. 

Nos quedamos un rato más así en el sofá y después nos fuimos un rato con sus amigos. 

La tarde se nos hizo entretenida. 

Sobre la hora de cenar volvimos y sus tíos aún no habían llegado. Ayudamos entre todos a su madre a preparar la cena y nos sentamos a cenar. 

-Mmm, que bueno está todo mamá. -le dijo Lou. 

-Sí, Lou tiene razón. -dijo Lottie. La verdad que ese asado de ternera estaba riquísimo. 

Y así, así, siguió la cena. Al acabar recogimos todo y nos fuimos todos ha dar un paseo y ha tomar un helado a una heladería que había cerca de allí. 

-Lou... -dijo su hermana Daisy sentándose sobre las rodillas de éste.- te voy ha echar mucho de menos... 

-Yo también enana. Y mucho. -y la abrazó fuerte. Dios, casi lloro, y creo que los demás también.- Pero en pocos días nos volvemos ha ver. -y les sonrió para que se animaran todos. Enserio, lloro. 

Antes de que nos acabásemos los helados acabamos todos llorando.

-¿Y tú porqué lloras? –me preguntó Phoebe. Que estaba sentada sobre mi, como Daisy sobre Louis.

-Porque me recuerda a mi familia.

-¿Los echas de menos? 

-Muchísimo. –me abrazó. Es un amor de niña.- Y también os echaré de menos a vosotras ¿sabes? –aún seguía abrazada a mi.- Os he cogido mucho cariño a todos.

-Yo a ti también. Me caes super super super bien. –y me dio un beso en la mejilla.

Dejamos todos de llorar, nos acabamos los helados y nos dirigimos a casa.

(Por el camino)  

-Haaay madre, que tengo una novia llorona. –me dijo Lou abrazándome de lado.

-Tsé. Tu también has llorado.

-Los hombres también lloran ¿Vale?

-Jajajaja no te hagas el indignado que yo no te he dicho nada he…

-Anda ven. Necesito un abrazo. –nos paramos en medio de la calle y estuvimos unos minutos abrazados. Su familia iba por delante andando tranquilamente. 

(Al día siguiente, después de comer)

-Venga chicos, es hora de que os lleve al aeropuerto. -nos avisó su padre. 

-Claro, ya vamos. 

Nos despedimos todos (incluido de sus tíos), pero Louis no podía parar de llorar y su madre estaba igual. Mientras ayudaba a su padre a meter las maletas en el coche, Lou estaba abrazado a su madre. ''Que bonito, joder.'' 

Al fin nos despedimos una vez más de todos y su padre nos llevó al aeropuerto. 

Se quiso quedar con nosotros hasta que el avión despegara. 

-Chicos, tener cuidado. -dijo abrazándome, luego me dio un beso fuerte en la mejilla.- Y cuídala. No la dejes escapar. -escuché como le decía su padre al abrazarlo.

-Lo sé, papá. -seguían abrazados.- Haber si pronto nos vemos. 

-Claro que sí, hijo. -la voz mecánica del aeropuerto nos avisó de que nuestro vuelo salía. Le dijimos un último ''Hasta pronto.'' y nos dirigimos para embarcar.-  Llamarnos. 

-Sííí. -dijo Lou de espaldas a su padre mientras nos alejábamos de éste.