CAPÍTULO 70

Buenos chicos que decir, CAPÍTULO 70 YAAAAAAAAAA!  OHHHH DIOSSSS NO  NO ME LO CREO NI YO MISMA! AHHHHH!!!!!

Bueno que si he llegado al cap 70 es todo gracias a vosotros que seguís la novela, que la leéis, comentáis, dais a me gusta... 

Este capítulo quiero dedicarlo a todas esas persona que gracias a hacer lo que he dicho antes, me animáis a que siga escribiendo, por eso quiero que disfrutéis mucho este capítulo ya que va para todos vosotros! :)

Y ahora ya os dejo leer.

OS LOVEOOO MUUUCHO MUUUCHO MUUUUCHO <3

Narra Paula

Ya estábamos a 29 de Octubre. Durante estos dos meses casi, nos habían pasado muchas cosas. Izan consiguió trabajo como batería en un local muy céntrico de Londres donde hacían muchos conciertos, Mireia y Rocío consiguieron un empleo de media jornada en una cafetería. En esa que fuimos Lou, Josh, Helen, Alison, las hermanas de Lou y yo cuando vinieron. Brit se había vuelto a España… de repente, sin motivo alguno quiso ir de vuelta allí para vivir. Y había dejado a Niall. El pobre estaba… en fin, sigamos, yo ya no trabajaba en la tienda fotográfica. ¿El motivo? Cerraron la tienda para trasladarla a Liverpool. Y María estaba en una academia de estilismo en nivel superior, ya que ella en España ya había hecho el nivel medio. Mientras los chicos habían estado de promoción por distintos países, y ya hacía un mes y medio que no los veíamos, por tanto, no pudimos celebrar el cumple de Nialler.

Hacia una semana que llegué a Valencia. Al aeropuerto me vino a buscar mi padre. ¡Hay mi padre! ¡Hacía tanto que no lo veía! ¡Si hasta se había echado novia y todo!

-Entonces, ¿te vas a Madrid mañana? –preguntó mi padre decepcionado.

Estábamos cenando en casa de Lucía, su nueva novia. La verdad que la chica era simpática. Era un poco más baja que mi padre, como yo más o menos. Tenía el pelo de color miel y los ojos los tenía marrones. Era ginecóloga, tenía un hijo que se llamaba Hugo que tenía la edad de Louis. 

-Sí papá.

-¿Es más importante lo que tienes que hacer allí que tu padre? –ya empieza.

-Papá no empieces. –bufé de mala gana. Desde el día anterior que se lo dije hasta ahora igual. ¡Bfff!

-Eso Carlos, déjala. –dijo Lucía.

-Es que no entiendo qué tiene que hacer allí.

-¿Hola? –pregunté incrédula.- ¿Ver a Lou? Mi novio. ¿Ver a mis amigos? ¿Ver a mamá? ¿Ver a mis hermanas?

-¿Tienes novio? –me preguntó Hugo sorprendido.

Y así siguió el resto de la cena. En cuanto pude me fui de esa casa. No por Lucía o Hugo ni nada, pero es que mi padre me puso de los nervios de verdad. Lucía me estuvo preguntando sobre mi relación con Louis, como iba, como nos llevábamos, si hablábamos a menudo por eso de la distancia… en fin, cosas de ‘’madre’’, y Hugo hacía comentarios tipo ‘’Pues yo no entiendo que le ves a ese, total, casi ni lo ves’’ ¿PERDONA? ¿Y ESTE DE QUE VA SI ME ACABA DE CONOCER?

A la mañana siguiente me despertó el sonido de mi móvil.

*Conversación telefónica*

-Hmmm. –contesté boca abajo en la cama.

-Buenos días princesita, feliz cumpleaños.

-Gra… -bostecé.- gracias cariño.

-¿Estabas dormida?

-Un poco.

-¿Sabes la hora que es?

-Más o menos, -me di la vuelta y me puse boca arriba.- sé que es de mañana.

-Son las nueve menos diez.

-¿QUÉ? –me levanté corriendo de la cama.- ¡Mierda! Tengo que colgarte, en cuanto esté en el tren te llamo o algo. ¡Te quiero!

*Fin de la conversación telefónica*

Tenia que coger el tren que me llevaba a Madrid a las diez en punto.

Me vestí corriendo con un pantalón vaquero oscuro, una camiseta de media manga roja y mis Converse rojas con una rebeca fina y me hice un moño alto. Recogí todo lo que tenía por mi casa y desayuné un triste vaso de leche, me fui corriendo a casa de mi padre a despedirme y me llevó a la estación. Llegué justísima de tiempo pero no lo perdí.

En cuanto estuve sentada en el tren le hablé por Whatsapp a Lou. Estuvimos hablando hasta que él se tuvo que ir a hacer un par de entrevistas que les quedaban para por la mañana. Me conecté a Twitter y estuve contestando felicitaciones que tenía. Tenía de todas las chicas y de los chicos, de mis hermanas, de la madre y las hermanas de Lou, las hermanas de Liam, de amigos de Valencia, de familiares… El resto del camino estuve hablando por Whatsapp con uno de los grupos que tenía. O sea, de María, Mireia, Danielle y Rocío. Brit se salió del grupo cuando volvió a España. El trayecto a Madrid se me pasó volando. Cuando llegué, en la estación me estaban esperando mi madre y mis hermanas. Nos abrazamos como nunca y nos dimos miles de besos y fuimos a casa de mi madre. Se trasladó a Madrid con mis hermanas a principios de Octubre porque era más cómodo para su trabajo. Y es que claro, eso de tener que coger el Ave todos los días para ir a Madrid… como que no. Dejé mis dos maletas en la que se supone que ‘’es mi habitación’’, hicimos la comida y luego fuimos de paseo por Madrid. Sobre las seis y media mi madre tuvo que irse al plató para prepararse para las noticias de por la noche. Nosotras tres nos quedamos por el parque del Retiro. Sobre las ocho nos volvimos a casa y nos pusimos a ver la tele. Ellas se fueron para su habitación a hacer quién sabe qué y yo me quedé viendo Pasapalabra. Durante la tarde me llamaron los chicos para felicitarme otra vez. Pudimos hablar muy poco porque tenían que hacer una entrevista. A las ocho y veinte Louis me habló por Whatsapp.

Rey del Pijama: Guapa, guapa, guapa, guapa, guapa, guapa!!!! –dijo en español también.

PaulaRomeroH: ¡¡Tú, tú, tú, tú, tú, tú, tú!!

Rey del Pijama: ¿Tienes ganas de verme?

PaulaRomeroH: Sabes que sí. ¿Y tú a mí?

Rey del Pijama: MUCHO, MUCHO, MUCHO.

PaulaRomeroH: ¿A qué hora llegáis mañana?

Rey del Pijama: ¡Sorpresa! :O ¡Estamos en Madrid! (:

PaulaRomeroH: ¿QUÉ? ¿DE VERDAD?

Rey del Pijama: Te lo prometo.

PaulaRomeroH: ¿Y me lo dices así tan tranquilo? AHHHHHHHH

Rey del Pijama: Acabamos de llegar al hotel. Estamos en recepción.

PaulaRomeroH: ¿Y os han visto las fans?

Rey del Pijama: No porque no lo hemos querido hacer oficial. Menos mal. 
PaulaRomeroH: ¿Y cuándo nos podemos ver?

Rey del Pijama: En cuanto suba y deje las maletas en la habitación voy donde estés.

PaulaRomeroH: ¿Os dejan quedaros en mi casa a cenar?

Rey del Pijama: Si hablas con Paul a lo mejor nos deja.

PaulaRomeroH: ¿YO? ¡Qué vergüenza Lou!

Rey del Pijama: Sí, tú. Es que así seguro que nos deja, le caes muy bien. Por favor L

PaulaRomeroH: Está bien. Tengo un plan.

Rey del Pijama: Yo también. Ven al hotel y así como que no quiere la cosa se lo dices en persona y pones tu cara de niña buena. ¿No?

PaulaRomeroH: Ese era mi plan ¬¬

Me dijo el nombre del hotel, avisé a mis hermanas de que enseguida volvía y salí lo más rápido posible sin decirles a donde iba. De camino en el taxi le dije a Louis por Whatsapp que estuviera en recepción. Estaba super nerviosa. Cuando llegué al hotel pagué al taxista y entré casi corriendo en el hotel. Al entrar no lo vi por ningún lado pero a los segundos de estar ahí uno de los ascensores se abrió y de ahí salió él, tan guapo como siempre.

-¡HAAAAAAA!! –fui corriendo hacia él.

Me abrazó fuerte, fuerte, fuerte y me dio muchas vueltas por el aire.

-¿Cómo está la reina de mis pensamientos? –dijo mirándome con esa mirada de no-sabes-lo-mucho-que-he-deseado-este-momento.

-Nerviosa. –dije emocionadísima.

-Hay, abrázame. –sin darme tiempo a decir algo o a reaccionar me abrazó más fuerte que antes todavía.- ¡Feliz 20 cumpleaños princesa! –dijo de lo más feliz posible. Me besó apasionadamente y nos volvimos a abrazar.- ¡Vamos arriba! –me cogió de la mano y entramos en el mismo ascensor del que minutos antes había salido.

-¿Cómo que estáis aquí ya? –pregunté. Él estaba apoyado en la pared. Me abrazaba por la cintura y yo lo rodeaba del cuello.

-Ya no teníamos nada que hacer allí y bueno, tenía que hacer algo importante aquí en España, ¿no crees? –me miró sonriendo con cara de tú-eres-la-razón-de-que-estemos-aquí-medio-día-antes.

-¡Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero por dios! –le di muchos besos en los labios.

Las puertas del ascensor se abrieron y salimos cogidos de la mano, como al entrar en él. Llegamos a la habitación 566, abrió la puerta con la tarjeta y la dejó abierta para que yo pasara. Entré despacio y los vi a todos esparcidos por la habitación. Niall y Harry estaban en el suelo con medio cuerpo debajo de la cama, Zayn estaba mirándose en el espejo de al lado del armario y Liam estaba pegándole golpes al mando de la tv con la mano. Se ve que no funcionaba el mando o algo jajajajajaja.

-Chicos… -dijo Lou al entrar y cerrar la puerta. Liam se giró y se quedo con cara de WTF.

-Hola. –dije sonriendo mucho.

-¡Paula! -Liam vino corriendo a abrazarme.

-¿Paula? –dijeron los otros tres a la vez

Niall y Harry al intentar salir de debajo de la cama se dieron en la cabeza.

-JAJAJAJAJAJAJAJA no os matéis por venir a saludarme corriendo por favor. –dije.

-¡Que gracioso El Pequeño Poni! –vinieron los tres a abrazarme y me puse a llorar.

-Pero no llores Pau… -me dijo Niall limpiándome las lágrimas con sus pulgares.

-Es que… -empecé a hablar sonriendo y llorando.- no me creo que estéis aquí ahora mismo. –lloré más.

-¿Cómo no íbamos a venir a celebrar tu cumpleaños? –dijo Zayn con su sonrisa matadora. Harry dijo ‘’Abrazo colectivo para la sensible del grupo chicos’’ y me abrazaron los cinco. No se quién fue pero me empezó a hacer cosquillas.

-¡EHHH! ¡ESO NO!  -intenté salirme del corro dándoles manotazos.

-¿Qué pasa? –dijo Liam mirándome con cara rara. Los miré a todos intentando averiguar quién fue y vi a Niall riéndose.

-¡NIALL! ¡VEN AQUÍ FURBY! –se puso a correr por la habitación venga la risa cuando vio que iba a por él.

-¡AAAAAHHH! ¡AYUDARME! –dijo con la cara super roja de tanto reírse y de tanto correr.

-Noooo, ven aquí.

-¿Alguien me explica que pasa? –dijo Zayn.

-Que cuando me abrazabais ha empezado a hacerme cosquillas. –dije mirando mal a Niall.

-¡Huy, que buena idea! –dijo Lou mirándome con su sonrisa traviesa.

Entonces vinieron los cinco detrás de mí para hacerme cosquillas.

-Si llego a saber esto no vengo… -dije respirando fuerte. Estaba tumbada en la cama al lado de Lou.

-Si a ti te gusta tonta. –se inclinó a mí y me dio un ligero beso.- Venga, ve a hablar con Paul.

-¿A hablar con Paul? –preguntó Harry.

-Sí. –afirmó Lou.- Es que Paula nos ha invitado a su casa a cenar pero no creo que Paul nos deje, si habla ella con él… creo que así sí nos deja.

-¡Hay sí! ¡Corre, date prisa! –dijo Niall levantándose del suelo. Se acercó a mí y me cogió del brazo para levantarme de la cama. Puso las manos en mis hombros y me sacó de la habitación. Se acercó a la habitación 568 y llamó con la mano.- ¡Por favor, haz que nos deje! –y en menos que canta un gallo se metió de vuelta en su habitación. Y todo esto yo flipando.

-¿Paula? –dijo Paul mirándome de arriba a bajo al abrir la puerta.

-Paul, -lo señalé.- Paula. –me señalé y me reí yo sola. JAJAJAJAJAJAJA que gracia más mala por dios.- JAJAJAJAJAJA.

-Hmm… no lo pillo. –frunció el ceño.

-Tú eres Paul y yo Paula. Paul, Paula. JAJAJAJAJAJA.  –hice un gesto con las manos.- ¿Lo pillas ahora?

-Sí bueno… -se rio moviendo la cabeza de un lado para el otro como diciendo ‘’esta chica…’’

-¿Cómo estás? –le pregunté para calamelármelo.

-Bien ¿y tú? ¿Qué te trae por mi habitación? -¿cómo lo sabe? Ohh, que fuerte.- Te conozco, Louis siempre me habla mucho de ti y sé como eres.  –rio.

-Bueno, yo… hm… -me puse nerviosa.- Había pensado… que como hasta mañana a medio día no tienen nada que hacer… -seguí el consejo de Lou y ‘’puse mi cara de niña buena’’.- que si podrían venir a mi casa a cenar.

-Per…

-Por favor. –Sonreí de la manera más dulce posible.- Hace casi dos meses que no los veía…

-Paula, es mucha responsabilidad. –Se cruzó de brazos.- Entiende que tengo que estar al cargo de ellos. Sus familias confían en mí.

-¿Y… si te vienes tu también a mi casa?

-Bueno, eso está mejor. –Sonrió.- A demás, Niall dice que la comida española está muy buena. –dijo divertido.

-¿Entonces los dejas si tu también vienes? –pregunté esperanzada.

-Supongo que sí.

-AHHHH, -tuve el impulso de abrazarlo y lo hice.- ¡gracias, gracias, gracias, gracias!

-Jajajajaja. –Me separé de él de lo más contenta posible.- Vamos en la furgoneta ¿de acuerdo?

-Sí, sí, sí. –di saltitos de alegría.

Entró en la habitación y yo de mientras fui a la de ellos. Les conté todo y bueno, aunque no les hacía mucha ilusión les pareció bien.

A los cinco minutos Paul apareció por la habitación con Preston y Andy. Los chicos cogieron sus cosas y nos fuimos a mi casa en dos furgonetas negras de esas con los cristales tintados. Cuando llegamos a mi casa mis hermanas fliparon en colores. Subieron arriba a sus habitaciones para cambiarse de ropa. Dijeron que no podían estar en pijama si iban a cenar con cinco superstars y tres guardaespaldas. Jajajajaja. Mientras ellas se cambiaban de ropa les enseñé la casa y se sentaron en los sofás. Cuando ellas bajaron saludaron a todos como dios manda y los chicos les presentaron a Paul, Preston y Andy. Se quedaron viendo la tv y yo me puse a hacer la cena con ‘’ayuda’’ de Lou. Quisieron tortilla de patatas. Muy poco original pero es lo que querían todos. Lou se puso un delantal rojo y negro que era como si fuese un traje de sevillana jajajaja. Quiso que nos hicieran una foto a los dos y llamó a Harry para que nos la hiciera. Lou le dio su móvil y nos la hizo, luego me hice una con Harry con su móvil. Lou la subió a Instagram y de titulo puso ‘’Feliz 20 cumpleaños cielo, te quiero mucho XX’’ Oins, me lo como. Lo había escrito todo en español. Porque claro, desde que se enteraron que venían a España le estuve enseñando un poco de español. Harry también la subió, de título puso ‘’El P.P. se nos a hecho mayor, feliz cumpleaños xx’’.

Cuando acabamos de cenar, Paul, Preston y Andy se fueron a dar una vuelta y a dejarnos un poco intimidad. Durante la cena vimos el telediario, naturalmente el canal en el que mi madre salía. A los chicos les hizo gracia ya que nunca la habían visto. Nos sentamos en los sofás y nos contaron muchas anécdotas que les habían pasado durante estos casi dos meses y yo les conté mi semana por Valencia. Estaban super emocionados porque iban a El Hormiguero. Nos dijeron que algunos famosos les habían dicho que era un programa muy divertido. Pues sí la verdad. Yo en España lo veía todos los días que lo hacían. Cuando vino mi madre se alegró mucho de verlos allí y los abrazó a todos. Paul llamó a Liam para decirles que a las once y media tendrían que irse. En ese instante, Niall se levantó del sofá y dijo que iba al servicio. Antes de ir se acercó a mí y me preguntó que si le acompañaba, ya que él no sabia donde estaba. Yo acepté y le acompañé. Mientras íbamos por el pasillo, me paró un momento y me preguntó:

-Paula, ¿sabes algo nuevo de Brit? –dijo con los ojos llorosos. 

-Lo siento Nialler, no se nada más de lo que sabemos todos, desapareció, acabó con lo vuestro y nada más… -se me caía el alma de ver a mi Furby así.- Es más el otro día se fue del grupo que teníamos en el whats.

-Paula, de verdad, estoy muy fastidiado con esta situación, le he llamado un millón de veces pero no me coge el teléfono. - Se puso a llorar.- Ya no sé que más hacer…

Yo le abracé e intenté tranquilizarlo.

-Niall sé que es duro, tienes que dejar que el tiempo pase, va a ser duro, lo vas a pasar mal, vas a buscar una respuesta a todo esto, vas preguntarte todos los días que que has hecho mal para que esto pase… Pero con el paso del tiempo verás como esta herida se cura y vuelves a ser nuestro Furby de siempre, -Rió- y seguro que encuentras a tu verdadera princesa que te quiera y te de todo el cariño que te mereces. –le di un beso en la mejilla y le acaricié la espalda para calmarlo un poco.

-Muchas gracias Paula, de verdad, está siendo muy difícil, pero sé que os tengo a vosotros, y que me vais ayudar en todo. -dijo un poco más tranquilo.

-Eso ni lo dudes. –Le di otro beso.

En ese momento oímos unos pasos que se dirigían hacia nosotros, Lou.

-Chicos no sé que estaréis haciendo, pero hace mucho tiempo que habéis ido al baño y todavía no habéis vuelto, y ahora os veo aquí abrazados… A ver si me tengo que poner celoso ehh… -dijo divertido para hacer sonreír a Nialler. 

-Con lo que yo te quiero a ti. -me acerqué a Lou y cogiéndolo de los mofletes le di un beso en los labios. 

-Boo, no te tienes que poner celoso que nuestra española solo tiene el corazón para ti, y que suerte…

-Jajajaja eso ya lo sé yo. -que amable por su parte, jajajajaja. 

Y Lou hizo que nos diéramos un gran abrazo los tres, supongo que sabría que Niall estaba triste.

[…]

 A las once y media justo tuvieron que irse. Me despedí de todos ellos y quedamos en vernos a la mañana siguiente. Comeríamos juntos para ‘’celebrar mi cumpleaños’’.

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PD: Tengo un problema. Cuando el otro portátil se me rompió, se me borró la lista con los nombres de Twitter de las personas que tengo que avisar... y ahora cuando os aviso por Twitter hay algunos nombres que están mal escritos o que os habéis cambiado el nombre. ¿Podéis decirme otra vez TODOS los nombres y os vuelvo a apuntar? Gracias amorcillos míos. OS LOVEEEEEEO.

CAPÍTULO 69

Hola hoolaaaaaaaa!!

Feliiiiiiiiiz navidaaaaaaad a todos mis preciosos lectores que son la cosa que más quiero. <3

Este capítulo se lo dedico a la pervertida de Cris. Sé que te gusta el número 69 *guiño* *guiño*

También se lo dedico a nuestro Louis por esos 21 añazos que los lleva como nadie. ¡¡Cada día que pasa más guapo!! Le deseo todo el amor (mío, jajajajajaja) y toda la felicidad que ya tiene para este año. I LOVE YOUUUU TOMMO <3

Y ahora sí que sí, a disfrutar del 69 *guiño* *guiño* JAJAJAJAJAJAJAJAJA. 

Narra Paula

Ya llevaba un rato largo con Rocío, Danielle y las hermanas de Liam, sus novios se habían ido a la barra a pedir algo hacía rato. Estábamos hablando de cuando se irían de Londres, cuando de repente la música paró y alguien empezó a hablar con un micrófono. Busqué a mi alrededor para ver quién podría ser el que hace parar una fiesta para decir algo que seguramente a los que estaban en la fiesta no les importaba y entonces lo vi, ahí estaba Louis con un micrófono en la mano en la cabina del Dj.

-¿Alguien sabe donde está mi Monster High? Hace rato que no la veo. –dijo mirando entre todas las personas que habían.

-¡Louis, tío! ¿Para eso me haces parar la música? –dijo Zayn intentando quitarle el micro de  las manos. La gente empezó a quejarse para que volvieran a poner la música.

-¡Hey! –le pegó un manotazo a Zayn para que no le quitara el micro.- Solo va a ser un segundo de nada. –le sonrió con cara de niño.

-¡Date prisa! -Sonreí al ver aquella escena.

-No te enfades, Aladín… -le acarició la mejilla sonriéndole.- ¿Entonces, nadie ha visto a mi Monster High? –volvió a preguntar hacia la gente que estaba en la pista de baile. Todos le chillaron a la vez: ¡Cállate ya y que pongan música! JAJAJAJAJAJAJA pobrecito mío.- Hey, hey, hey… tranquilos, que yo solo quiero encontrar a mi Barbie gótica. –sonreí mucho más.- A ver, si me ayudáis acabo con esto cuanto antes y la música vuelve… -se calló unos segundos.- Va vestida de Monster High. –que buena pista… jajajajajaja.- Es mi novia, es muy guapa, es la mejor, es fotógrafa, aunque bueno… eso de que es fotógrafa aquí no ayuda mucho para encontrarla… -se me escapó una carcajada al ver el lío que se estaba haciendo él sólo.- y eso, ¿la habéis visto ya?

-¡Ahí está pesado! Anda tira. –dijo Zayn señalando hacia mí y quitándole el micro de las manos. Louis al verme sonrió, y yo también.- ¡Ahora bájate ya de aquí! –jajajaja que gracioso que estaba Zayn así.

-Ya está… ya podéis seguir con la fiesta. –dijo Lou como si nada saliendo de la cabina del Dj.

-Decirle que aquí no estaba ¿vale? –les dije a las chicas levantándome de aquel sillón tan cómodo.

-¿Y eso? –preguntó Danielle.

Sin contestarle, me mezclé entre la gente sintiéndome como una niña pequeña cuando juega al escondite y no quiere que la encuentren.

Observé como Lou intentaba cruzar la pista para llegar donde yo estaba segundos atrás, así que avancé más hacia la derecha y a los pocos segundos Lou llegaba donde estaban ellas. Por la cara que hizo cuando les preguntó algo, supongo que preguntaba dónde estaba yo. Puso las manos en sus caderas y se giró para echar una vista rápida a toda esa gente, yo entre ellas. En un momento dado, sonrió de medio lado y empezó a andar hacia delante, o sea, en mi dirección. Me metí más entre la gente y lo perdí de vista. Lo volví a ver y así estuvimos unos minutos más. La verdad que lo estábamos pasando bien.

Noté que alguien me ponía las manos en mi vientre desde la espalda y me atraía hacia él.

-Ahora ya no puedes escapar. –dijo sobre mi cuello. Sentí su sonrisa y automáticamente sonreí también.

-Ahora ya no quiero escapar. –me di la vuelta y sonreímos. Me incliné un poco y le di un beso en la comisura de los labios.

-¿Podemos irnos ya? –dijo casi como una súplica. Segundos después me dio un largo beso. 

-Ansioso. –le dije sobre sus labios después de seguirle el beso.

-Mucho. –sonrió con suficiencia y me cogió de la mano para sacarme del engorro de gente que había en la pista. Parecía que tenía prisa, me llevaba casi a rastras.

Por el camino vimos a Izan, Sandy, María, Mireia y Harry, a Josh y a mucha gente más que yo no conocía, todos nos pararon para comentar lo bien que estaba yendo la fiesta. Antes de salir del todo vimos a Liam, bueno, a él fuimos a buscarlo a posta para volver a felicitare y para preguntarle como lo ha estado pasando y todo eso, nos costó bastante ya que había gente haciéndose fotos con él, que según Louis, no estaban invitados en la fiesta, es más, nadie sabía quienes eran. Cuando logramos hablar con Liam nos despedimos de él y salimos. Fuera había más de diez paparazzis haciendo fotos. También había algún que otro periodista. Louis cuando vio a toda esa gente me pasó el brazo por la cintura y empezó a  caminar más deprisa.

Hicieron preguntas tipo: ¿Desde cuando estáis en Londres? ¿Cuándo os volvéis a marchar? ¿Cómo lleváis la promoción? ¿Estáis listos para una gira mundial? ¿Estabais todos los chicos en la fiesta? ¿Cómo se siente Liam teniendo 19 años? Cuando hicieron esa última pregunta los dos miramos al chico que lo había preguntado como diciendo: ¿Cómo se siente? ¿Enserio? ¿WTF?

Nos montamos en el coche y en veinte minutos llegamos a su casa. Mientras él subió a no sé que, yo entré en la cocina para beber un poco de agua fresca. Cuando terminé de beber subí y entré en su habitación.

-¿Dónde estás? –pregunté al no verlo por la habitación.

-En el baño, no entres hasta que yo te diga ¿vale, Monster? –reí al escucharlo llamarme Monster.

-Vale, Peter.

-Ya puedes entrar. –me dijo a los diez minutos. Se me habían hecho eternos.

-Por fi… -me callé al ver el cuarto de baño.- Es precioso… -dije con los ojos brillando y mirando todo mí alrededor.

Había llenado todo el baño de velas pequeñas de color verde clarito y blanco, y había llenado la bañera a rebosar de agua. Estaba llena de espuma y de pétalos del mismo color de las velas. Los pétalos también estaban por el suelo esparcidos.

-Tengo al mejor novio del mundo. –lo miré y me acerqué de inmediato para abrazarle.- Te quiero.

-Lo sé, es difícil no quererme.

-Idiota. –sonriendo le pegué suave en el pecho.

-Que es broma tontaaa. –me abrazó más fuerte y me miró fijamente.- Yo también te quiero. –me derretí ante esa mirada tan intensa y tan azul y levanté la cabeza y le besé.- Venga, vamos a meternos que se enfría el agua. –me dio un beso rápido en los labios y en pocos segundos nos quitamos los disfraces con la ayuda del otro.

-¿Por qué verde? –pregunté cogiendo un pétalo verde del agua una vez ya dentro de la bañera.

Estábamos cada uno en un extremo de la bañera. Uno en frente del otro. Nuestras piernas estaban enredadas y él me tenía ‘’sujeta’’ de una pierna. Su mano viajaba todo el rato desde mi tobillo hasta mi rodilla, y así todo el rato. O sea, más relajante imposible.

-¿Y por qué no? –preguntó y me encogí de hombros.- Dicen que el verde relaja. –aclaró mejor mi pregunta.

-No en todas las situaciones. –dije ladeando un poco la cabeza.

-No en ésta. –sonrió divertido.- Nos quedan tres horas.

-Eso da para mucho.

-Uhhh, desafío en el aire. –solté una pequeña carcajada.

-Tómalo como quieras. –dije sonriendo y cerrando los ojos mientras apoyaba la cabeza hacia detrás. Sin emitir ningún sonido, pude saber que estaba sonriendo. Sonreí también. A los pocos segundos escuché como se movía, abrí los ojos lentamente y lo vi arrodillado hacia mí, se acercó poco a poco y plantó un casto beso sobre mi cuello, cerré los ojos de nuevo. Otro beso sobre mi cuello, esta vez más abajo. Ahora debajo de mi oreja, ahora detrás, se entretuvo más de la cuenta en esa zona de mi cuello.- Hmmm. –suspiré y siguió. Despacio, muy despacio, fue bajando sin prisa por mi cuello y plantando suaves besos a lo largo de él. Antes de abrir los ojos para poder verlo, me topé con sus adictivos labios. Le mordí el labio inferior porque sé que eso es lo que más le puede y gimió. Sonreí victoriosa y lo besé yo ésta vez. Puse las manos en su pecho y con cuidado lo empujé hacia atrás. Estiró las piernas a lo largo de la bañera y me senté encima de él. Me incliné un poco hacia delante e hice justo lo que él hizo conmigo, llenarlo de besos que dejan con ganas de más. Suspiró fuerte y poniendo sus manos en mis caderas y con un pequeño empujón se introdujo en mí.

[…]

Lou estaba tumbado en la cama y yo casi encima de él, digo casi porque tenía más de medio cuerpo aplastándole. No llegaban a saciar mis ganas de tocarlo. Tenía apoyada la cabeza en su hombro, mi mano en su cintura y una pierna encima de él. Él tenía un brazo rodeándome por la cintura. Escuché un casi insonoro ruido y abrí los ojos.

-¿Tengo que tener un guardaespaldas para que vigile que no me hagas fotos mientras duermo? –dije con voz de dormida.

-No hace falta cariño, porque te haría fotos de todas formas. –inclinó un poco la cabeza hacia abajo y me dio un beso en la cabeza para darme los buenos días.

Me despegué como pude de él y me senté encima. Me estiré para delante y conseguí alcanzar mi móvil. Puse la cámara preparada.

-Aquí la fotógrafa soy yo guapo.

-¡Eso no vale! –se tapó la cara.- Yo salgo mal así.

-Si yo salgo con pelos de Rey León tú tienes que salir con cara de Oh, que cosa más guapa soy.

-Jajajajaja. –se quitó las manos de la cara y estiró su brazo para volver a coger su móvil.- A ver quién sale mejor.

Empezamos a hacernos fotos a lo loco. Con miles de caras raras. Pero raras raras. JAJAJAJAJAJA. Luego me tumbé a su lado y estirando el brazo hacia arriba nos hicimos muchas más, pero ésta vez bien, sin hacer el payaso.

-¡Tengo que irme! –se levantó rápido de la cama.- ¡Voy a llegar tarde al aeropuerto! –empezó a vestirse muy rápido y tropezando por la habitación.

-¡Dios! –me levanté yo también.- ¿Qué horas es?

-Tarde para mí, -me arrastró de la cintura hasta la cama y se sentó a mi lado para ponerse sus Converse blancas.- pero no para ti. Quédate a dormir más, todavía es muy pronto para que te levantes.

-Pero tendré que ir a mi casa, tú te vas.

-Paula, eres mi novia. Es mi casa, es tuya. Te puedes quedar hasta que te de la gana. –se levantó y se dirigió hasta una cajonera buscando algo de uno de los cajones.- Como si te mudas aquí conmigo. Tienes llaves.

-No, no… -me volví a levantar.- lo mejor es que me valla ya.

-No seas tonta, -vino hacia mí con un gorro de lana en las manos y me volvió a meter en la cama. También se sentó a mi lado. Me senté teniendo las sábanas por encima de mis piernas y le quité el gorro de las manos y antes de ponérselo le peiné un poco con las manos mientras él seguía hablando.- quédate aquí hasta la hora que quieras. –miró la hora en su móvil.- Ahora tengo que irme si no quieres que pierda el avión y Paul ya no nos deje ‘’escaparnos’’ otro día. –sonreí apenada y pasé mis brazos por su cuello. Le sonó el móvil y cortó la llamada.

-Quiero que sepas que te quiero mucho, mucho, mucho, muchísimo. –le di un beso corto.- Y… muchas gracias por lo de hace un rato. Bueno, por todo. –sonrió y le di otro beso, pero este más largo.

-No des gracias por cosas así. Es como si yo ahora voy a tu madre y le digo: Gracias por hacer una hija así. –ahajdgljdalhañkja. Ladeé la cabeza y sonreí como una tonta.- Y claro, aunque ya lo sepas, te quiero –me dio un beso.- te quiero –me dio otro.- te quiero –me dio otro.- te quiero mucho –me dio infinitos besos cortos y seguidos.- te quiero, te quiero, te quiero, te quiero… -dijo casi rozando mis labios. Le volvió a sonar el móvil y volvió a colgar.

-Vete ya. –dije al ver que no paraban de llamarlo. Rompió la poca distancia que había entre nosotros y me abrazó muy fuerte, luego nos dimos el beso que, probablemente sería el último de muchos, muchos días.

-No te vallas a tu casa ya ehh, -se levantó de la cama.- es muy pronto y fuera casi aún no ha amanecido.

-Nooo. –me sonrió y se agachó al suelo para coger el macuto ese marrón que lleva a todos lados cuando va de viaje. Donde lleva su portátil y todas sus cosas.- Llámame donde quiera que sea que tenéis que llegar.

-Alemania. –dijo desde la puerta de la habitación.

-Llámame cuando lleguéis a Alemania entonces. –acurruqué mis rodillas y las abracé.- Y diles a todos que siento no despedirme de ellos pero que los quiero mucho.

-Lo primero que haré. –sonrió ocultando tristeza. Le volvió a sonar el móvil.- Te quiero. –dijo y salió de la habitación.- ¡Qué sí Harry, que sí! Gracias por haber llamado a un taxi para que venga a por mí. Estoy saliendo d cas… -no escuché más conversación porque Lou ya estaba en la planta de abajo. Al poco escuché cerrarse la puerta principal.

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CAPÍTULO 68

¡¡¡Amorcillooooooooooos míoos!!!

Espero que os guste este capítulo (: 

Muchísiiiiiiiimas gracias por los comentarios del cap anterior y por todas las visitas de todos los capítulos. Ma' que os quiero ehh :) 

Bueno, no mm enrollo más y os dejo leer, en cuanto pueda os subo el siguiente. (ahora que ya tengo las vacaciones de navidad subiré prontito) 

Pd: OS LOVEEEEEO MUUUCHO

Narra Paula

-Pe... pero... -lo miré de arriba a bajo y por fin reaccioné.- ¡AAAAAAAH! -fui rápida hacia él y nos abrazamos como si no nos hubiésemos visto en años.- ¡¡Estás aquí!! -Tenía sus manos en el final de mi cintura y yo rodeaba su cuello con mis brazos.- ¡Pero qué guapo que estás! -le pasé mis dos manos por el pelo mientras sonreíamos mucho.

-¿Te ha gustado mi sorpresa? -dijo con sonrisa de niño después de darme un beso muy fuerte.

-Gustarme es poco. -sonreí más y puse mis dos manos en sus mejillas y le di muchos besos cortos.

-Venga, salgamos de aquí que nos está mirando todo el mundo. -giré un poco la cara y sí, nos estaba mirando toda la tienda, incluidos Mary y Jeff. Me sonrojé un poco.- Tenemos 25 minutos todavía. -dijo feliz.

Le dije a Mery y a Jeff que volvía cuando mi descanso terminara y cogida del brazo de Louis salimos de la tienda. Fuimos al Starbucks. Pedimos un batido cada uno y nos sentamos en el piso de arriba al fondo, lejos del gran ventanal. Nos sentamos muy pegados, yo con mis piernas encima de su regazo y él pasando su brazo derecho por mi cintura, atrayéndome más hacia él. 

-¿Y qué haces aquí?

-Hemos venido para celebrar el cumpleaños de Liam.

-¿Y os han dejado? -pregunté asombrada.

-Bffff... -suspiró.- Si supieras lo mucho que hemos insistido a Paul para que nos dejara... Nos ha chantajeado y todo.

-¿Sí? -pregunté abriendo la boca en modo sorpresa.

-Sí, nos ha hecho jurar que nos portaríamos bien durante todo el tour y que nos iremos a dormir sin rechistar cuando él nos lo diga.

-JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA. -me reí muchísimo. No podía parar.- Pobrecitos míos. -le acaricié la mejilla mientras le ponía morritos como a un niño pequeño.

-No te rías... -dijo riéndose también.- Hemos aceptado solo por estar unas horas con vosotras. -me dio un beso en el cuello.- Y Harry le ha suplicado mucho a Paul.

-¿Y hasta cuando os ha dejado?

-Nuestro vuelo sale mañana a las siete de la mañana.

-¿Y dónde están los demás? Tengo ganas de verlos.

-¿No te apetece estar con tu sexy y fuerte novio? -alzó las cejas de forma sexy.

-Ohh siiii. -le di un beso en la comisura de los labios.- Me apetece mucho. -ahora le mordí el labio inferior. Sonrió con su sonrisa de ‘’Sé lo que quieres, yo también lo quiero nena.’’ y me dio un beso muy largo, un beso en el que se podía notar que habíamos estado más de dos semanas separados.- ¿Qué vas a hacer ahora? -volví a enredar mi mano por su pelo.

-Zayn y yo tenemos que ir ahora a Funky Buddha para terminar los últimos detalles de la fiesta sorpresa de Liam.

-¿Sorpresa?

-Bueno, él sabe que vamos ha ir esta noche a celebrarlo, pero los chicos y yo le hemos estado planeando algo más especial, hemos avisado a sus amigos, sus dos hermanas, los novios de las hermanas, ya sabes.

-Tengo que irme. -dije a las 11:40 mirando la hora en mi móvil.- Entro en cinco  minutos.

-Cierto. -se acabó su batido y nos levantamos.

De camino a la tienda fuimos como al salir, yo cogida de su brazo y sonriendo los dos como tontos. Alguna que otra niña se dio cuenta de que era Lou cuando nos veía por la calle, pero no lo paraban y eso yo lo agradecía porque si no llegaría tarde.

-¿A que hora sales? -preguntó una vez en la puerta cogiéndome la mano.

-A la una y media. Ahora salgo a esa hora todos los días.

-Perfecto. –se acercó y me dio un beso.

-Tengo ganas de estar contigo.

-Y yo. –apoyé la cabeza en su hombro y me acarició.- No sabes cuanto… -me dio un beso en la cabeza y me apretó más fuerte entre sus brazos.- Pero ahora será mejor que entres, había quedado con Zayn hace ya quince minutos y tú tienes que trabajar. –levanté la cara y le di un fuerte beso.- Te recojo en muy poco.

Me dio un último beso y un ‘’te quiero’’ y entré en la tienda de la manera más feliz posible. Le estuve contando a Mary que habían venido a Londres para el cumpleaños de Liam y todas esas cosas. Dios, que feliz que estaba de tener a Lou aquí… Hasta que se hizo la hora de salir estuve más feliz que una perdiz. Llevaba una sonrisa de TONTA que nadie ni nada podría quitármela.

Ya era la una y media, hora de salir. Lou entró en la tienda justo cuando yo estaba casi en la puerta. Saludó a Mary (Jeff no estaba), estuvieron unos minutos hablando y salimos.

-¡Zaaayn! –dije de lo más contenta al verlo. Estaba justo en frente de la tienda apoyado en un coche rojo y fumando.

-¡Heey! –tiró el cigarro casi entero y vino contento a abrazarme y darme dos besos.

-¿Nervioso? –pregunté al ver que estaba fumando.

-Brrr sí. –hizo cara de asco. Reí al ver su cara.- Mucho.

-Tío, todo va a salir a la perfección. –le dijo mi Lou.- No te comas más la cabeza.

-¿Qué pasa? –pregunté curiosa.

-La fiesta de Liam pasa. –dijo Zayn malhumorado.- ¿Te puedes creer que al final sólo nos pueden dejar la planta de arriba para la fiesta? –dijo resignado levantando los brazos.

-Zayn, no se acaba el mundo por eso. –dije para quitarle importancia.

-¡Es su cumpleaños! ¡Tiene que salir perfecto!

-No dramatices tanto. –dijo Lou. Empezamos a andar hacia algún sitio. Supongo que hacia el coche de Lou o de Zayn.

-¿Qué no dramatice? –lo miró indignado.- Como no salga bi…

-Va a salir mejor que bien. –lo interrumpí con una sonrisa tranquilizadora.

-Eso espero. –suspiró poniendo las manos dentro de los bolsillos de sus pantalones.- A demás, -puso cara de chulo.- el Dj soy yo… -puso morritos de ‘’Ehh, el Dj soy yo, cuidado.’’

-¡Pues claro que sí! –grité eufórica.- ¡Dj Malik al mando!

Andamos unos minutos más hasta llegar al coche de Zayn. Lou y yo nos sentamos detrás. Fuimos a una pastelería donde yo me morí al instante de ver todo aquel chocolate con taaan buena pinta. Hablaron con el encargado para ultimar el detalle de la tarta de Liam mientras yo me compré un pastelito de chocolate. 

-Luego no vas a comer. –me dijo Lou al ver el pastelito.

-Ohh claro que si. –me comí el poco que me quedaba ya.- Tengo mucha hambre. –sonreí.

-Y… ¿Tienes hambre de mí? –dijo picarón.

-Mmm, mucha. –contesté con voz sexy.

-Callaros anda, que eso a nadie nos importa. –dijo Zayn.

-Claro, pero tú lo primero que has hecho es subir a la habitación de María ¿no? –le dijo Lou para picarlo.

-Aquí tenéis chicos, -dijo el encargado dándoles un papel con algo escrito.- pasaros a las ocho.

-Muchas gracias.

-Hasta luego.

Salimos de la tienda y nos volvimos a subir al coche de Zayn. Nada más subir llamaron a Zayn al móvil y lo puso en manos libres.

-¿Dónde vamos ahora? –pregunté a Louis despacio para no molestar a Zayn.

-A casa de Zayn, Liam y Niall. Comemos allí.

-Tengo mucha hambre.

-Yo también. –dijo alzando una ceja y sonriendo pícaro.

[…]

Nada más llegar a casa de los chicos, Niall abrió la puerta y nos abrazamos enseguida, al entrar vi a Liam y lo abracé y felicité, saludé a las chicas, a Izan, a un amigo de Liam, Andy, y nos sentamos en los sofás a hablar de como lo habían pasado y esas cosas.

-¿Dónde están Mireia y Harold? –les pregunté.

-Han ido a recoger la comida. –me dijo Brit.

-¿Dónde?

-Al chino que hay a dos manzanas de aquí.

-¡Tengo mucha hambre! –se quejó Niall.

-¡Ya somos dos! –me quejé yo también.

-Claro, es que el pastelito de chocolate que te acabas de comer no era suficiente ¿no? –dijo Lou burlándose.

-¿Te comes un pastelito y no me traes uno? –me dijo Niall ‘’indignado’’.

A los quince minutos llegaron Harry y Mireia con la comida. Yo estaba en la cocina bebiendo un poco de zumo de melocotón.

-¿Cómo está la cosa más pija de Londres? –dijo alguien a mis espaldas. Me giré y lo vi.

-Aunque me acabes de decir ‘’cosa’’ te voy a abrazar igual.

-Haaaaay mi Pequeño Poni. –me abrazó fuerte.- ¿No has echado de menos a tu Harold?

-No. –me miró muy serio.- JAJAJAJAJAJAJA sí tonto.

[…]

Narra Louis

Después de comer dejamos a Liam con todas las chicas e Niall y Andy en su casa,  Izan, Harry, Zayn y yo nos fuimos a acabar de preparar lo de su fiesta.

Zayn fue a Funky Buddha a organizar y nosotros tres fuimos a un centro comercial nuevo que según Izan es impresionante.

Por el camino recibimos un wpp de Zayn para lo de los disfraces, Mireia lo quería de abeja, Danielle y Paula de Monster High, Brit de Caperucita Roja, María de mariquita y Rocío de Super-Woman.

Nos costó dos horas y media encontrar el adecuado para cada uno. Harry lo cogió del Gato con Botas, Izan de Super-Man a juego con Rocío, a Niall uno de Furby, a Zayn le cogimos uno de Aladín, por hacer la gracia y eso… yo cogí uno de Peter Pan y a Andy nada porque nos dijo que él ya lo tenía.

Avisamos a Zayn de que ya los teníamos todos y los dejamos en casa de Harry y mía. El resto de la tarde pasó volando, cuando volvimos de lo de los disfraces volvimos a casa de Liam, Niall y Zayn. Liam no paraba de preguntarnos que a dónde habíamos ido, y que dónde estaba Zayn… ¡Que pesado es cuando quiere ehh! Sobre las seis y media pasadas llegó Zayn, y a las ocho y pico fuimos a cenar a casa de las chicas e Izan. A las once, Paula, Mireia, Harry y yo fuimos a  nuestra casa a por los disfraces. Las llevamos de vuelta a casa de las chicas e Izan y convencimos a Liam para que no preguntara nada y se pusiera el disfraz. El suyo era el mejor, de Batman.

-No Liam, no nos preguntes nada más. –dijo Niall.- Ponte el disfraz y calla.

-Per…

-Ven conmigo. –le dijo Danielle llevándolo a la planta de arriba.

-¿Subes conmigo? –me preguntó Paula.

-Sí si.

-¡No hagáis nada y daros prisa ehh! –oímos cuando estábamos casi arriba.

(Tres horas y media más tarde, en Funky Buddha)

-Nunca pensé que me pondría tanto una Monster High. –le dije a Paula mientras bailábamos muy pegados.

-JAJAJAJAJAJAJAJA aguanta un poco que todavía queda fiesta por delante, Peter Pan. –dijo cuando se dio cuenta que mis manos iban por todos lados.

-Estás muy guapa de Barbie gótica. –dije besándole el cuello.

-¿Es una Barbie gótica?

-No lo sé, nunca he entendido estas muñecas, pero a mis hermanas pequeñas les encantan.

-Tienen cara de Bratz.

-Vamos a decirle a alguien que nos haga una foto. –saqué mi iPhone de aquel bolsillo tan estrecho y le dije a Stan que nos hiciera la foto. Nos hizo tres, una yo dándole un beso en la mejilla, una haciendo caras raras y otra bien.

-¿Has subido alguna? –me preguntó cuando le sonó el móvil.

-Puede ser. –sonreí travieso.

Estuvimos un rato más bailando y luego ella se subió con Zayn. Allí arriba en lo del Dj estaban Zayn y María. Yo necesitaba bailar más, así que me uní a Brit, Niall, Mireia y Danielle.

Narra Paula

Después de estar con María y Zayn y hacernos fotos en la cabina del Dj, volví a la pista de baile, pero esta vez era para cruzarla y buscar el baño. Me tocó hacer cola porque había mucha gente. A los diez minutos de estar esperando se acercó alguien. Era Josh. Hablamos un poco y veía que no se atrevía a decirme algo.

-¿Qué quieres decirme Josh? –se pasó la mano por el pelo y dudó.- Puedes confiar en mí, lo sabes.

-Es que es sobre tu hermana. –ogg.- Sé que a ti no te hace gracia que ella y yo… bueno ya sabes, -se volvió a pasar la mano por el pelo.- ¿sabes por qué no responde mis llamadas?

-Bfff, ¿no te lo ha dicho? –negó con la cabeza.- Ha vuelto con su ex.

-¿Qué? ¿Con ese idiota? –gritó.

-Sí… -moví la cabeza asintiendo.- la verdad es que prefiero que esté contigo a que esté con un capullo que no pueda saber si es Helen o Alison, y que se líe con media Valencia.

Lo animé un poco para que no pensara en mi hermana y disfrutara de la fiesta y entré en el baño. Al salir vi a Rocío y fuimos a la barra a pedir algo. Una vez en la barra vimos a las hermanas de Liam con sus novios y nos sentamos en unos sillones a hablar. La verdad es que son muy simpáticas las dos, y sus novios también. 

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PD2: Si alguien cambia su nombre en Twitter decirme el nuevo para avisaros <3