CAPÍTULO 51

¡¡¡ Hooooooola hooooola !!!

Bueno, y aquí el capítulo 51. Como siempre... Espero que os guste el cap. 

Por favor, decirme que os parece. Si no os gusta, también.

Si hay alguien que quiere que le avise, que me lo diga.   :)

Y si tenéis alguna pregunta, ASK. 

Ya está, os dejo leer. Aviso: Es largo.  (:

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¡¡¡ OS LOVEO !!! 

Narra Paula

La tarde pasó volando. Entre que los chicos se quedaron a comer -menos Louis, claramente.- y nos pusimos ha ver una peli. Pues eso, que se nos pasó volando. 

En esos momentos yo estaba sentada en el sofá del comedor recordando todo lo que había pasado horas atrás. La TV estaba apagada, y había un silencio absoluto inundando el comedor. Las chicas se fueron no sé donde a por no sé qué. Y Izan estaba haciendo algo en... Pues no sé. Pero aquí en casa conmigo. 

-¿Qué te pasa? -me preguntó Izan sentándose al lado. 

-¡Hay, que susto! -pues sí, me asustó al tirarse de golpe en el sofá. 

-Quejica. -le miré mal y el sonrió con su perfecta sonrisa.- ¿Que te pasa? -joder Izan, no hay que ser muy listo para saberlo he.- Lo vais ha solucionar. Ya lo verás. -me leyó el pensamiento. 

-Puede que sí. -hice un pequeño silencio.- Puede que no. 

-Oh venga, ya sale la Paula negativa que llevas dentro. -me hizo sonreír un poco su comentario.- Ahora mismo te invitaría a algo con chocolate fuera de casa para subirte ésos ánimos. -lo miré abriendo los ojos al escuchar la palabra chocolate.- Pero no puedo. -claro, como no. Se levantó del sofá y se dirigió hacia la ventana.- Está lloviendo. -me levanté y miré yo también por la ventana. 

-No pasa nada. -dije camino a las escaleras.- Pero me debes algo de chocolate. Que no se te olvide. -y subí las escaleras.

-No se me olvidará. -lo escuché cuando ya casi había llegado al piso de arriba. 

Llegué a mi habitación y me tumbé en la cama. Al cabo de una media hora o así, me senté en el escritorio y encendí mi portátil. Abrí la carpeta de fotos de cuando viajamos a Los Ángeles y me puse ha ver fotos de nosotros dos. En ese pequeño viaje nos hicimos muchas fotos juntos. 

Lo dejé en modo ''Presentación'' para que se pasaran solas y me tumbé en la cama para mirarlas desde ahí. Hacía algo de frío, así que fui hacia mi armario, lo abrí y cogí una manta. Me volví a tumbar en la cama y me tapé. A partir de ahí no recuerdo mucho más porque me dormí.

-Paula... -me tocaban el hombro. Yo solté un pequeño gemido en forma de protesta. Quería dormir más.- Paula, despiértate. 

-No. -le pegué un manotazo a quien quiera que fuese. 

-Está bien, ahí te quedas. -ahora sí que reconocí que era Izan el que intentaba despertarme.- Pero tú verás, yo de ti me levantaría y me bajaba a abrir la puerta. 

-Joder Izan -me levanté refunfuñando y bajé hacia abajo soltándole algunas paridas. Pobre.- ¿no podrías abrir tú o qué? ¿Tan importante era lo que estabas haciendo que no podías abrir la put... -abrí. No me lo podía creer. 

No reaccionaba de ninguna manera. Izan se fue hacia la cocina dejándome sola con Louis en la entrada de casa. Al cabo de unos minutos se decidió a hablar ya que sabía que yo no iba a hablar. ''No me salen las palabras ¿vale?'' Pensé a la defensiva para mis adentros. 

-Hola. -me dijo un poco... No sé, pero no muy kjadajkldj. ¿Sabes? 

Narra Louis

Nada más llamar al timbre me puse muy nervioso. Mucho. Nadie abría, pero había luz en casa así que lo volví a intentar. Después de llamar tres veces escuche un ''Ya vaaaa.''. Era Izan. 

Después de unos minutos esperando y empapándome aún más de lo que yo ya estaba... 

-¿Tan importante era lo que estabas haciendo que no podías abrir la put... -dijo renegando cuando abrió la puerta. No terminó la frase cuando me vio. Izan se fue hacia dentro. No sé hacia donde.

-Hola. -dije a los pocos minutos. 

''¿'Hola.' Louis? ¿Eso es lo único que sabes decirle? Y encima lo dices seco. Y no quieres eso. Quieres arreglarlo con ella. Y si le dices un simple 'Hola.' y de la forma más seca del mundo, no lo lograrás. Eres tonto.'' 

-Louis... -dijo al fin con cara de haber visto a un fantasma.

-¿Has visto a Cásper? -¿Que chorrada es esa Louis? 

-¿Qué? -dijo un poco más espavilada. Se notaba que estaba durmiendo antes de yo venir. 

-Nada, déjalo. Cosas mías. -seguía mojándome. 

-Anda pasa, que estás empapado. -dijo empujándome con cuidado hacia dentro. 

Entré y me quedé de pie en el comedor. 

-He venido para... -no pude acabar. 

-Vale. -me interrumpió.- Pero primero dúchate y cámbiate, anda. 

-Hm... está bien. -dije no muy seguro de lo que quería hacer primero.

Subimos arriba y me dijo que entrara en su baño. Me entré y me duché. Pero al salir me di cuenta de algo. No tenía ropa. Que idiota soy, de verdad. 

-Paula. -dije asomando la cabeza por la puerta. 

-Dime. -dijo entrando en la habitación al poco de yo llamarla. 

-No tengo ropa... 

-Espera. -salió otra vez de la habitación. 

Estaba en la habitación esperándola a que volviera a entrar. Hacía días que no entraba en su habitación, así que me puse a inspeccionarla. Me di cuenta que en su portátil salían fotos nuestras de cuando estuvimos en Los Ángeles. A los 5 minutos o así volvió a entrar con ropa en la mano. Me habría visto con cara de idiota. Pero esque no paraba de sonreir al ver las fotos en la pantalla.

-Toma. Ponte esto. -me tendió en las manos algo de ropa. Yo estaba con una toalla enrollada en la cintura y sentado en su cama. Llevaba el pelo mojado aún. 

-¿Podemos hablar? -dije cogiéndole la mano después de darme la ropa.  

-Cámbiate. 

-No. No aguanto un minuto más. Paula por favor. -puse cara de cachorrito. 

Narra Paula

-No. No aguanto un minuto más. Paula por favor. -asentí con la cabeza y él, que aún me tenía cogida de la mano, me sentó a su lado. En la cama.- Verás. Antes que nada, te digo que para mi esto es muy difícil. -suspiró.- Quiero pedirte perdón. -intenté hablar pero me tapó la boca con su dedo índice mientras seguía hablando.- Sí, sé que quizás tú no quieras perdonarme y no quieras saber nada más de mi. Lo sé. No te culpo. Pero joder, Paula. ¡Yo te necesito! -dijo todo muy rápido.- ¡Te necesito dentro de mi vida! -intenté hablar otra vez pero volvió ha hacer lo mismo de antes.- Llevamos unas pocas horas separados y para mi es como si hubieran pasado millones de años, sí, llámame exagerado. Pero es así. Millones. Y yo... yo no puedo soportar esa tortura. ¿¡No lo entiendes!? ¡TE NECESITO! ¡PERDONAME! ¡Haré lo que sea, lo que tu quieras, pero por favor, dame otra oportunidad. -dijo casi en un susurro esto último. 

-Louis, yo... -no sabía como decirle que claro que lo perdonaba. Pero que me había hecho estar muy mal estas horas. 

-Paula, ¡PERDONAME! -dijo como si la vida le fuese en ello. Yo estaba a punto de reír de verle así. Tan alterado. 

-¡LOUIS QUE SI QUE TE PERDONO PERO TRANQUILÍZATE! -dije chillando yo también. 

-¿DE VERdad? -dijo bajando el tono de voz conforme iba diciéndolo. 

-Sí. -dije flojito.- Yo también te he hechado MUCHO de menos durante estas horas. Solo me apetecía escuchar un...

-Te quiero. -complementó la frase. Sonreí como una tonta. 

-Sí, exacto. Un te quiero de los tuyos. Y solo de pensar que no lo volvería ha esc... 

-Te quiero. -volvió a repetirme acercándose a mi oído y cogiendo mis mejillas.- Te quiero Paula. -dijo rozando mis labios. Yo estaba que no podía más, en serio. 

-Si me vas ha besar, hazlo ya porque me está dando alg... -sonrió y antes de que yo acabara la frase me callo con el mejor beso que me había dado nunca. 

-Eres una impaciente. -dijo después de que yo lo volviera a besar con más intensidad. 

-Calla. -me besó por el cuello y pegué un pequeño saltito de la emoción de volver ha sentir sus labios sobre mi piel.- Estás muy sexy sin toalla ¿sabes?. -le dije cuando a mi ya no me faltaba nada de ropa. 

-Lo que yo decía. -le miré extraña.- Una impaciente. -rió y me volvió ha besar. Le quite la toalla y nada más que decir. Lo demás os lo imagináis todos. 

(3 horas más tarde)

-¿Te quedas ha cenar? -le pregunté abrazándole. Aún estábamos en la cama. Pero ya vestidos. No penséis mal. Jajajaja. 

-No lo sé. -me besó en el pelo. 

-¿Eso es un si? 

-Paula, eso es un no lo sé jajaja. -le pegué despacito en el pecho y reímos.- Venga, vamos ha ver fotos. Que me apetece. 

Me levanté a por el portátil. Que aún estaba en el escritorio. Seguían pasando las fotos en modo ''Presentación''. 

-Esta me gusta mucho. -dijo en una que salíamos los dos abrazados en el paseo de la fama. 

-A mi también. -me levanté de la cama y me dirigí a mi estantería buscando las fotos que revelé el otro día en la tienda. Por cierto, pasado mañana empiezo a trabajar.

-¿Qué es? -preguntó mirando la bolsa que llevaba en las manos. 

-Las fotos que revelé el otro día. -busqué entre ellas y saqué la que quería darle.- Toma. 

-¿Cuál es? 

-Mírala y lo sabrás. -me volví a acurrucan entre sus brazos tan y como estaba antes. 

Se quedó mirándola unos segundos y sonrió muy feliz. Le había enseñado la foto que acabábamos de ver en el portátil. Sí, esa que ha dicho que le gusta mucho. 

-Me encanta. -me acurrucó más fuerte aún. 

-Pues es para ti. 

-No. Es tuya. No es justo que yo me la quede. 

-Louis... venga. No me seas así. -me incorporé un poco para mirarlo mejor.- Para ti. El lunes cuando valla a trabajar hago otra copia.

-Pero hazla he. 

-Sí, tu por eso no te preocupes. -le sonreí y le di un beso en la mejilla.