CAPÍTULO 59

¡¡Hooola hoola!!

Hoy no voy ha decir nada, solo que espero que lo disfrutéis. 

OS LOVEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEO MUCHO MUCHO MUCHO

[ 25 de Junio. Domingo ]

Narra Paula

-Paula... -escuchaba una voz muy flojito.- Paula, tu móvil. 

-Déjame dormir, estoy cansada. -le di un pequeño manotazo a Helen.

-Te están llamando tonta. 

-Son las once y veinte. -miré la hora en mi despertador sin casi abrir los ojos.- Si es importante, insistirán. -dije yo tapándome la cabeza con la sábana. 

Dejó de sonar mi móvil. Y nada, no insistieron más. 

-¿Lo ves? Nada importante. -dije a los pocos minutos. 

-Cállate, yo también estoy cansada y quiero dormir. -dijo dándose la vuelta y quedándose de espaldas hacia mi. 

-¡LOUIS! -dije sobresaltada levantándome de un salto y cogiendo mi móvil para mirar la llamada.

-¿Louis? -se reincorporó un poco, mirándome extrañada.- ¿Qué pasa?

-Su familia. -frunció el ceño.- Deben estar ya aquí. No me acordaba. -me metí corriendo en el baño para darme una ducha lo más rápida posible. 

A los cinco minutos si llega, salí con una toalla enrollada y vi a Helen dormida otra vez. Me dirigí hacia mi armario y me vestí. Pero antes me asomé a la ventana y hacía frío.

-Helen... -le acaricié el brazo. Abrió los ojos y movió la cabeza para que siguiera hablando.- Cuando bajes, diles a los demás que estoy en casa de Louis, que ha venido su familia y que a la hora de comer estoy aquí.

-Vale... -volvió a cerrar los ojos. Le di un beso en la frente y bajé a la cocina.

Abrí un armario de ésta y cogí una magdalena para comérmela por el camino. 

Narra Louis

Mi familia ya había llegado. Y la casa estaba revolucionada. Harry estaba sentado en el sofá con las gemelas, cada una estaba a un lado y él tenía sus brazos al rededor de ellas, y por lo que parecía, Harry les estaba contando algo y ellas lo escuchaban atentamente, no paraban de reír. Por otro lado, mi madre, Fizzy y Lottie estaban conmigo en la cocina. Estábamos hablando de como les había ido el viaje y de muchas cosas más mientras preparábamos el desayuno para todos. Ellas ya habían desayunado en casa, pero tenían un poco de hambre, y Harry y yo nos acabábamos de despertarnos. Mi móvil sonó. Era un mensaje de Paula.

''Chico Avatar, estoy a dos calles de tu casa, así que prepárame algo para desayunar que tengo mucha hambre xx.''

-Que sea un desayuno más. -dije contento mientras dejaba el móvil en la encimera y abría el armarito de los vasos para sacar uno para ella. 

-¿Va ha venir Paula? -preguntaron las tres a la vez.

-Sí, me ha dicho que está de camino. 

-¿Sabes? -me dijo Lottie apoyándose en mi hombro.- Tu novia me caer muy bien. 

-Me alegro de que eso sea así. -le di un beso en la cabeza y la abracé.

-¿Has dicho algo de Paula? -dijeron las gemelas entrando en la cocina. 

-Sí. Que está viniendo. -en eso que sonó el timbre y salieron corriendo hacia la puerta. 

-¡Paulaaa! -se escucharon sus vocecitas. 

-¡Pequeñaas! ¡Pero que grandes que estáis!

Salimos de la cocina y vimos a Paula agachada abrazándolas. Que bonita estampa. Enseguida se les unieron al abrazo las demás. Mi madre le dio muchos besos en la sien después de que se dieran un gran abrazo. Al cabo de unos minutos, cuando acabaron de abrazarse otra vez y todo eso, entramos a la cocina para acabar de preparar el desayuno. Nos sentamos por este orden: Mamá, yo, Paula, Phoebe, Harry, Daysi, Fizzy y Lottie al lado de mamá cerrando el círculo de la mesa. 

-Esto es demasiado bonito como para no hacer una foto. -dije levantándome muy feliz de la mesa. 

Saqué mi móvil del bolsillo de mi pantalón de pijama y hice una foto, luego la subí a Instagram.

De título puse: ''Esto es demasiado bonito como para no hacer una foto.'' 

Vamos, lo mismo que les había dicho a ellos. 

-Entonces, ¿también está aquí tu familia? -le preguntó mi madre a Paula.

-Sí, han venido mi madre y mis hermanas para celebrar el cumpleaños de ellas. -dijo muy sonriente. Se notaba que estaba muy feliz.

-¿A si? Eso es genial. 

-¿Sabéis que sus hermanas son gemelas? -dije yo después de beber un poco de leche. 

-¿Sí? -dijeron las gemelas a la vez. Ella asintió.- ¡Como nosotras! 

-Son idénticas. Pero idénticas, idénticas. -dijo Harry emocionado. 

-¿Las podemos conocer? 

-Claro, cuando queráis. 

-¿Y cuántos años han cumplido? -preguntó Lottie. 

-18. Anoche lo celebramos. 

-Ahhh, ahora lo entiendo... -dijo su madre mirándonos a Harry, Paula y a mi.- Por eso tenéis esas caras de no haber dormido nada. -nosotros asentimos riendo. 

-¿Y dónde vamos a dormir? Que yo sepa aquí no hay sitio para todas nosotras. -dijo Fizzy. 

-No os preocupéis por eso, -les contestó Harry.- yo esta tarde me voy a Italia con mi novia, si no os importa mucho, mi cama está libre durante diez días, y es muy grande, y hay dos habitaciones más.

-¿Te vas a Italia? 

-Sí. Esta tarde a las cinco y media sale el avión. -dijo muy orgulloso. 

[...] 

Estábamos todos organizando las habitaciones. Al final quedaron así: Fizzy y Lottie, dormirían en la de invitados. Mamá en la otra de invitados, y Phoebe y Daysi en la de Harry. 

-Hola mamá. -dijo Paula al contestar la llamada.- Sí, claro, ahora en un momento voy. Sí... no tardo. -y colgó. 

-¿Qué pasa? -pregunté sentándome a su lado en la cama. 

-Nada, que la comida ya está y que si no voy rápido se va ha enfriar. 

-¿No comes con nosotras? -preguntó Phoebe saliendo de debajo de la cama.

-¿Qué hacías tú ahí? -le pregunté mientras la cogía por la cintura y la sentaba sobre mi. 

-Esconder mi maleta ahí debajo. ¿Por qué Paula no come aquí con nosotros? -me preguntó poniéndose un poco triste.

-Porque su familia está aquí en Londres y también la quieren ver. -le dije acariciando su mejilla. 

-¿Pero luego nos puedes presentar a tu familia? -le preguntó esta vez a ella.- Yo quiero conocer a tus hermanas y a tu mamá. 

-No seas pesada, Phoebe. -me levanté de la cama con ella en brazos y la dejé en la habitación en la que estaba mi madre con las demás. Luego volví a la de Harry, donde estaba Paula.- ¿Entonces ya te vas? -dije acercándome a ella, que estaba de pie. 

-Sí, pero luego nos vemos ehh. -dijo ella mientras acababa con la poca distancia que nos quedaba.

-Claro que sí, y mañana comemos juntos. Que he hecho una reserva en un restaurante para que tu familia y la mía se conozcan. -dije rodeándola por la cintura y dándole un pico. 

-Que vergüenza... 

-Jajaja ¿por qué? 
-Por qué sí Lou. ¿Sabes la reacción que van ha tener mis hermanas al ver a tu familia? -dijo riendo y yo me lo imaginé y también me reí, me dio un fuerte beso en los labios.- Venga, me voy a mi casa ha comer. -le di un largo beso antes de que se soltara de mi.
-¿Te acompaño?
-No hace falta.
-Que si tonta, que te están esperando, te llevo en coche y así llegas antes.

Se despidió de todos y salimos de casa. Nos montamos en mi coche y la llevé a su casa. 

(Ya por la tarde)

Narra Paula

-Nos tenemos que ir ya. -dijo Harry levantándose del sofá mientras miraba la hora en su reloj. 

-¿Ya? Pero si aún es pronto. -dijo Brit. 

-Ya, pero si hay fans, que seguro que alguna hay, nos entretendrán un poco más y no quiero que perdamos el avión. -aclaró Harry. 

-Bueno, pues darme un abrazo. -dijo María yendo a abrazarles a los dos muy fuerte. 

-Pasarlo bien. -dijo Rocío abrazándolos también. Izan, Brit, mis hermanas y los demás también se despidieron. 

-Os acompaño a la puerta. -dije ayudándoles con las maletas. 

-Te voy ha hechar de menos. -dijo Mireia dándome un abrazo.

-Y yo a ti. -le di un beso en la mejilla y la volví a abrazar. 

-Dame un abrazo tonta, que sé que lo estás deseando. -me dijo Harry abriendo los brazos. 

-Traerme un regalo ehh. -dije mientras lo abrazaba. 

-No, vamos a traer a todos menos a ti. -me dijo dándome un beso en la sien. 

-Si eso llega a pasar, que lo dudo, dejo de ser tu más mejor amiga. 

-JAJAJAJA eres una chantajista. -dijo guardando las maletas en el maletero del coche. 

-No JAJAJA, bueno si. Pero lo digo en serio... -puse cara de niña pequeña.

-Bueno, bueno, ya te he dicho que voy a traer a todos menos a ti. -cerró la puerta del maletero.- ¡Pero no llores, que eres una llorona! –me dijo cuando vio que se me escapó una lágrima.- Que si que te vamos ha traer un regalo tonta. A ti el mejor. ¿Cómo no íbamos ha traerle un regalo a mi Pequeño Poni? –dijo mientras me abrazaba fuerte y yo lloraba un poco más.

-Haaay, ven aquí anda. –dijo Mireia abrazándome también. Me estaban abrazando los dos y yo estaba llorando.

-Que no lloro por eso idiota. –dije secándome las lágrimas.- Es porque os voy ha hechar mucho de menos a los dos, a mi el regalo me da igual.

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PD: Si hay alguien al que quiere que le avise cada vez que suba capítulo nuevo, que me lo diga (: